La repentina salida del ministro de Hacienda y Finanzas de la Nación, Alfonso Prat Gay, seguramente generó repercusiones en el Gobierno de Mendoza. Sin embargo, en la práctica, nadie dijo nada. Ninguno de los funcionarios de primera línea del gabinete de Alfredo Cornejo, relacionados con los temas específicos (hacienda, economía, finanzas), quiso emitir opinión.

“No habrá comentarios”, dijeron desde el Ministerio de Economía local, que conduce Enrique Vaquié. “No hay nada para decir”, indicaron desde el entorno de Martín Kerchner, ministro de Hacienda.

El hermetismo fue similar al que se dio en el despacho de Cornejo.

Sólo la vicegobernadora, Laura Montero, dijo algo, tras presentar su balance anual de gestión. “Ha sido un año muy dificultoso y quienes asumimos a nivel nacional y provincial, sabíamos que era para pagar altos costos”, indicó.

“Tal vez ese costo lo haya tenido que pagar Alfonso”, agregó.

Montero recordó que cuando fue senadora nacional, le tocó presidir la comisión de Economía y que Prat Gay ocupó “el mismo puesto, pero en Diputados”, con un desempeño “brillante”.

En lo que ayer fue casi un lugar común, la vice usó el ejemplo de la actuación del ex ministro en la negociación con los fondos buitre. “La tomó con muchísima responsabilidad”, resaltó.

Luego, rápidamente dio vuelta la página y fijó la atención en lo que vendrá. “Ahora le toca a otro equipo ir hacia adelante, con este desafío de poner la economía en funcionamiento”, señaló, sobre la tarea que deberán encarar Nicolás Dujovne y Luis Caputo en Hacienda y Finanzas Públicas respectivamente.

A falta de referentes del Ejecutivo local, quien hizo declaraciones desde Mendoza fue un integrante del gabinete nacional. De paso por la provincia (para revisar obras en Radio Nacional), el jefe del Sistema Federal de Medios, Hernán Lombardi, dio su opinión. “En un equipo de trabajo siempre hay modificaciones. Creo que Macri es un gran director técnico”, destacó.

Lombardi interpretó que el cambio de nombres se da “como metodología de trabajo”, y “no tiene que ver con diferencias en el enfoque ideológico”, más allá de que muchos han opinado lo contrario.

 

Relación fría

En noviembre de 2015, antes de asumir la Gobernación, Cornejo esbozó un “me gusta”, ante la posibilidad de que Prat Gay fuera ministro de Economía de Macri. Sin embargo, la relación con la provincia, este año, ha tenido altibajos.

Hubo puntos altos, como los acuerdos sobre la devolución del 15% mal retenido por Anses a la coparticipación. O los cambios a la Ley de Responsabilidad Fiscal.

Pero también puntos bajos, como las reiteradas negativas del ministerio de Prat Gay a iniciativas provinciales de endeudamiento. De hecho, si bien en Mendoza dicen que con el ministro saliente había “buen trato”, no falta el que señala a sus segundas y terceras líneas como “una máquina de impedir”.