Sabedor de que se trata de una carrera con final incierto en la que no faltan especulaciones de cotizaciones en alza y en baja de los anotados en la grilla de largada, el Ministro del Interior, Florencio Randazzo, redobló en las últimas horas su apuesta de posicionamiento para quedarse con la pulseada más brava –la única abierta- dentro del oficialismo provincial: completar el binomio reeleccionista de Daniel Scioli para octubre próximo.
Es que la falta de definición acerca del lugar en que lo encontrará jugando a Pablo Bruera la próxima elección más allá de su esforzado reposicionamiento K con el que aspira recuperar la confianza perdida en Olivos, había encendido luces de alerta dentro de los dispersos dirigentes K que empezaron a reunificarse alrededor de una candidatura para evitar, justamente, que la atomización de su nutrida oferta electoral terminase haciéndole el juego al alcalde platense.
Para atenuar esa chance, el kirchnerismo duro empezó a cerrar filas detrás de la figura del hijo de la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Guido Carlotto, con el fin de reducir la amplia grilla de aspirantes a alcalde comunal en la que fichaban, además de Kibo, Homero Bibiloni; Nora de Lucía, Guillermo Justo Chavez, Gustavo Oliva y Carlos Castagnettom, aunque este último en la representación de su esposa.
En el sostén de su postulación, Carlotto floreó a las principales figuras kirchneristas que se mostraron junto a él durante el lanzamiento de su candidatura o posaron a lo largo de lo que lleva el año electoral. En efecto, al respaldo originario de Julio Alak, el senador bonaerense fue sumando apoyo a su candidatura de las principales figuras ultra-K, como la del diputado Carlos Kunkel; el titular de la Autoridad de aplicación de la flamante Ley de Medios, Gabriel Mariotto; el ex canciller Jorge Taiana y del principal referente de la influyente agrupación kirchnerista La Cámpora, Andrés ‘Cuervo’ Larroque.
Lejos de encolumnarse, Randazzo re-lanzó la postulación de su candidato local, herencia de su pasado felipista: el Director del Instituto Nacional de Capacitación Política, Guillermo Justo Chaves quien opera bajo su órbita en el Ministerio nacional. El hermano de Helenita Chaves, la mujer de Felipe Solá, reforzó en las últimas horas su candidatura con una nueva campaña de instalación mostrándose junto a la Presidenta bajo la leyenda “Un modelo país, un modelo Ciudad. Cristina + Chaves”.
Según admitió el propio Chaves, por estas horas el espacio referenciado en el Ministro del Interior, negocia en La Plata la posibilidad de confluir en un acuerdo con Carlos Castagnetto, con quién –dijo- “coincidimos en una visión de proyecto nacional” que podría hacerlos “llegar a junio, con el cierre de alianzas”.
Junto al randazzismo, el virtual Ministro de Desarrollo Social de origen platense, fue otro de los que pegó el faltazo al lanzamiento de Kibo Carlotto y en las últimas semanas postuló a Ana Herrán en la carrera por el Ejecutivo municipal.
Dentro del núcleo duro del kirchnerismo platense, cuestionan el (re)florecimiento de las candidaturas K, lo cual empieza a atomizar una vez más el universo kirchnerista, que se había descomprimido con la deserción –forzada- de Homero Bibiloni y la corrida de Oliva, que coquetea ahora con el sabbatellismo.
“Randazzo se fotografía con La Cámpora y se burla en La Plata de la Agrupación desairando el espacio en el que se encuadra con un candidato que, encima, no mueve el amperímetro”, se quejaron desde el núcleo duro del kirchnerismo que integra el pelotón K en respaldo de Carlotto.
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