La vida personal de Hollande marca su visita a EE.UU.

La vida personal de Hollande marca su visita a EE.UU.
El presidente francés será homenajeado hoy con una cena de gala en la Casa Blanca.

Una visita de Estado a Washington para sellar una nueva alianza estratégica con Francia. Tres semanas después de su separación, transformado en un personaje conocido para la opinión pública norteamericana gracias a su affaire clandestino con la actriz Julie Gayet y creando un “imbroglio” protocolar por su nueva condición de soltero, el presidente François Hollande aterrizó ayer en la base Andrews con sus ministros y un grupo de empresarios franceses para un viaje de tres días a la capital de EE.UU. y a San Francisco.

Una visita que es un honor para Francia por la pompa que implica. Recibimiento con 21 cañonazos en la Casa Blanca, reunión a solas con el presidente estadounidense en el Salón Oval y cena de gala, en smoking y vestidos largos, con la pareja presidencial y 300 invitados.

¿El gran interrogante? ¿Quién acompañará a Hollande en la comida de gala, esta noche, después de la ruptura de su vínculo con la periodista Valérie Trierweiler? El protocolo estadounidense es tan pesado y puritano como el de un palacio real británico. Algunos dicen que nadie. Otros creen que podría llegar junto a Fleur Pellerin, la ministra de desarrollo digital, o Christine Lagarde, la elegante directora del FMI. Las tarjetas de invitación con el nombre de Trierweiler fueron discretamente destruidas por la Casa Blanca. Los diplomáticos encargados del protocolo se preguntaron durante días: “¿Viene con la otra mujer?”, sin que nadie pudiera responderles.

El presidente Barack Obama lo recibió con un gesto cálido e inusual. Lo invitó a descubrir juntos la mansión Monticello, residencia de Thomas Jefferson, el presidente estadounidense más francófono de su historia, en Virginia. Hasta lo llevó a hacer el corto trayecto en su propio avión “Air Force One”, donde tuvieron su primera charla privada. A pesar de una mutua simpatía, Hollande y Obama nunca habían tenido hasta ahora la posibilidad de mantener una relación próxima, más informal.

Así Hollande se convirtió en el quinto presidente en visita de estado a Estados Unidos después de India, México, China y Corea del Sur durante la administración Obama. Brasil rechazó la invitación por el escándalo de espionaje que reveló Edward Snowden.

La agenda incluye discusiones sobre Irán, Siria, la paz en Oriente Medio y, especialmente, las acciones antiterroristas en el desierto de Sahel, el sur de Libia, Níger y Somalia. Aunque no lo digan públicamente, el objetivo es consolidar la cooperación militar, discreta e intensa, en la alianza estratégica que ambos países están teniendo contra el terrorismo de Al Qaeda en Mali, el Congo y Libia.

“La alianza entre los dos países se transformó”, dijeron Obama y Hollande en una columna en los diarios Le Monde y The Washington Post.

“Después del regreso de Francia a la estructura de la OTAN hace cuatro años, nosotros hemos desarrollado nuestra cooperación en todos los niveles en el cuadro de nuestro compromiso de reforzar el partenariado entre la OTAN y la Unión Europea”, sostuvieron.

El presidente francés cenó anoche con la directora del FMI y el presidente del Banco Mundial en la residencia de la embajada francesa en Washington.

Hoy será el día más importante de su visita. Obama lo recibirá con todo el esplendor protocolar en la Casa Blanca. Se reunirán a solas, para luego participar en la gran cena de gala, a la que muy pocos de la delegación han sido invitados. No hay embajador francés en EE.UU. desde el verano europeo. Para los demás habrá un almuerzo con el secretario de Estado, John Kerry y el vicepresidente, Joe Biden.

Mañana, Hollande retomará un itinerario que hizo el ex presidente François Mitterrand 30 años atrás. Viajará a San Francisco para encontrarse con los millonarios emprendedores del Silicon Valley e innovadores franceses expatriados en California. Hollande desembarca en el corazón del capitalismo cuando su país está en profunda crisis, con un alto desempleo.

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