Por Patricia García

La Mesa Ejecutiva del PRO tiene previsto reunirse hoy en las oficinas de la calle Balcarce, en el centro porteño, para analizar cómo se definirán los candidatos 2023 en las provincias que no realizan elecciones primarias.

La temática, de interés para todos los socios de Juntos por el Cambio, irrumpirá en medio de la interna ya desatada por las candidaturas mayores (para las cuales se anticipan PASO).

Sorprendió Patricia Bullrich anunciando un acuerdo con Alfredo Cornejo en la provincia de Mendoza y también llamó la atención otro anotado para las presidenciales, el radical Facundo Manes, al apuntar contra Horacio Rodríguez Larreta por la baja del presupuesto en Educación. El diputado, respondió así a la decisión del Gobierno porteño de prohibir el lenguaje inclusivo en las escuelas.

En Mendoza, Bullrich tiene otro contrapunto contra Larreta, tras el corrimiento del diputado Omar De Marchi, un aliado, a la coordinación de la campaña de jefe de Gobierno, quien así busca “federalizar” su equipo que es por ahora muy porteño para la ocasión.

“No debemos hacer como en el 2015, donde un partido era el que gobernaba y otro el que prestaba apoyo, por el contrario tenemos que ser una verdadera coalición de gobierno”, dijo la titular del PRo ayer en Mendoza y que eso significa que “todos participan”.

“Esto es un cambio muy importante, es poner más fuerza en el gobierno, y no que alguno de los aliados se enteren por los medios de comunicación las políticas que se toman”, completó y remarcó que “sea una coalición de gobierno y no sólo una coalición electoral”.

Luego ponderó las gestiones en la provincia tanto del radical Alfredo Cornejo como del gobernador Rodolfo Suarez. Anticipó además que en algunas áreas “vamos a trabajar en conjunto” con Cornejo.

“Omar (De Marchi) tomó una decisión, rara, pero la tomó. Es su decisión y no la voy a cuestionar, pero tiene que ver cuál va a ser su relación con los mendocinos desde esa decisión”, acusó Bullrich poniendo más tensión a la interna de Juntos por el Cambio y a la de su propio sector.

En otro sentido, Manes provocó otra polémica, con el larretismo. El diputado aseguró que en la Ciudad se bajó el presupuesto para Educación. Apuntó así a un problema mayor a lo que puede generar el veto al lenguaje inclusivo. Remarcó que , en Educación, en el distrito porteño “se bajó el presupuesto 14% en los años del gobierno del PRO en términos reales” y que “se bajó el presupuesto para la educación cuando éramos uno de los países con mayor presupuesto de América Latina; el promedio de la calidad educativa de la ciudad de Buenos Aires es menor que al de Chile”.

“Lo que tenemos que discutir es que en el país es un desastre la educación, pero la Ciudad no es excepción: se bajó el presupuesto educativo en los 14 años de gestión del PRO”, afirmó el diputado radical. Ayer le salió a replicar el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel. Dijo que “desde 2007 a la fecha el presupuesto educativo en términos reales creció un 12%” y que “se destina casi el 20% de la inversión en educación, uno de cada cinco pesos”.