No solo eso, sino que incluso quedó relegado al tercer puesto, detrás de Esteban Bullrich y de Cristina Kirchner. El líder del Frente Renovador no pudo escapar de la polarización entre Cambiemos y Unidad Ciudadana y ni siquiera pudo triunfar en su propio espacio. 

El massismo esperó los resultados en el Estadio Pipa de Tigre, un lugar emblemático ya que fue elegido como búnker de campaña también en los comicios de 2013 y 2015.

En el caso de los senadores la contienda era difícil y Massa lo sabía. Solo ingresaban dos legisladores por la mayoría y uno por la minoría. Los resultados no acompañaron y con los casi 12 puntos porcentuales que obtuvo 1País en Buenos Aires, ni Massa ni su segunda, Margarita Stolbizer, estarán en el Congreso.

El panorama es aún más desalentador en la Cámara de Diputados. El problema para el massismo es que en estas legislativas puso en juego once bancas bonaerenses “puras”, más una de la “delasotista” Claudia Rucci; trece en total, si se suma la banca de Stolbizer. Sin embargo,  con lo obtenido, solo logró ingresar cuatro diputados. 

Poco después de las 22, Massa admitió la derrota: “Quiero felicitar a quienes nos ganaron, y decirles a los vecinos de Tigre que se queden tranquilos, que mañana con la misma fuerza y capacidad vamos a seguir transformando la realidad de nuestra casa que es la que nos permite mostrar lo que queremos en grande, lo que queremos para la Argentina”.