Con cautela, sin triunfalismos, y manteniendo el mismo discurso adoptado en el inicio de la cuarentena acerca de la necesidad de extremar cuidados, el gobierno de Axel Kicillof aseguró este jueves que comenzaron a percibir en los últimos días una tendencia al amesetamiento en el ritmo de los contagios de coronavirus Covid-19.

Según contaron fuentes del gobierno bonaerense a minutouno.com, el mandatario provincial mantuvo esta mañana una reunión con algunos de los intendentes de los distritos que conforman el conurbano bonaerense durante la cual el tema central fue la situación epidemiológica en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el epicentro de la pandemia en la Argentina.

Durante el encuentro, del que participaron entre otros Juan Zabaleta (Hurlingham), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Gustavo Menéndez (Merlo), Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) y Mariano Cascallares (Almirante Brown), Kicillof les informó que de acuerdo a los últimos reportes comenzó a identificarse un amesetamiento en el avance de los casos positivos.

Aunque alentadora, indicaron esas mismas fuentes, la noticia fue transmitida con cautela y la certeza de que no es tiempo aun de relajar precauciones para evitar contagios.

El mandatario provincial compartió con los jefes comunales un gráfico en el que se puede ver que en los últimos 4 o 5 días se registra una tendencia a la baja en la media de casos registrados en cada uno de los distritos que conforman el AMBA.

En el gráfico se puede advertir que apenas cinco municipios vieron aumentar en los últimos días la media de contagios diarios. Ellos son Malvinas Argentinas, Pilar, Quilmes, Presidente Perón y San Vicente.

Horas más tarde y en declaraciones radiales el jefe de asesores del ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, Enio García, hizo pública esta tendencia registrada en los últimos días y pidió no confundir la estabilización de los contagios con un “ya fue”.

Si bien las noticias son alentadoras García pidió "no bajar los brazos" ante la alta ocupación de camas de terapia.

"Todavía tenemos una ocupación alta de camas de terapia intensiva, aunque se está estabilizando", afirmó el funcionario y aseguró que de confirmarse esta tendencia indicaría que “pasamos el pico".

García recordó que "las unidades de Terapia Intensiva en la provincia a esta altura del año estaban al 60% y ahora al 69%, pero el año pasado había 850 camas y hoy 1600".