Acto seguido, Contessi aclaró que “en ningún momento se ha paralizado la obra o se ha demorado por culpa de alguna acción que haya hecho el astillero o el club Náutico, la obra sigue su curso normal y lo que estamos pidiendo es que se modifique y nos den garantías para que las etapas que vienen que son más condicionantes, no se hagan inadecuadamente”.

Asimismo, señaló que “compartimos la preocupación de los clubes náuticos por el tema de la contaminación y aparte somos el vecino lindero más cercano a donde desagua la obra de Arroyo del Barco y, prácticamente, nos está tocando la parte final del mismo y también está poniendo en riesgo las instalaciones edilicias como nos han dicho los propios ingenieros que están a cargo de la obra. Los mismos nos manifestaron que es posible que corra algún riesgo y se comprometieron a repararlas si así sucediera, lo cual no nos deja para nada tranquilos”.

Por su parte, Grimaldi añadió que “escuchamos la teoría que plantean los ingenieros de OSSE y vemos que en la práctica no está pasando porque cuando estamos navegando vemos una gran cantidad de basura que hay después de una lluvia que no se visualiza desde la costa, y la medida de prevención que propone Obras Sanitarias para cumplir reducir el impacto ambiental es una reja que tiene 10 cm de separación que no sirve de filtro porque cualquier plástico chiquito o botella de gaseosa de 600 ml pasa por un espacio de 10 cm”.

El vicepresidente del Club Náutico refirió también que están pendientes de la respuesta que el presidente del Directorio de OSSE se comprometió a darles la semana próxima.