MADRID.- El gobierno español estimó ayer en 40.000 millones de euros, de los 100.000 que ofrecieron sus socios europeos, la ayuda que necesita su sistema bancario para sanearse y contribuir de aquí en más a la recuperación de la rezagada economía del país, la cuarta en importancia en la eurozona.

El monto surge de una auditoría realizada por la firma norteamericana Oliver Wyman, cuyos resultados anunció ayer el gobierno de Mariano Rajoy en Madrid. Estimado en 59.300 millones de euros, el rescate, de todos modos, "podría ser significativamente inferior" a las necesidades señaladas, ya que parte del capital podría llegar por otros medios, como la venta de activos de los bancos. "Estaríamos hablando de una cifra en torno a 40.000" millones, afirmó el secretario de Economía español, Fernando Jiménez Latorre.

Los resultados difundidos ayer, en todo caso, están en línea con los que se presentaron luego de una primera auditoría en julio pasado, cuando las necesidades se cifraron en un rango de 51.000 a 62.000 millones de euros. Estos resultados demuestran que "el grueso del sistema financiero español es sólido", agregó el secretario de Economía.

BANKIA, A LA CABEZA

Oliver Wyman analizó las 14 principales entidades financieras españolas y, según el resultado de sus pruebas, las necesidades de capital se concentran en siete, capitaneadas por las cuatro que fueron nacionalizadas en los últimos tres años, después del estallido de la burbuja financiera.

La cuarta entidad del país, Bankia, nacionalizada en mayo, necesita 24.743 millones de euros, casi la mitad de los requerimientos de toda la banca. Las siguientes tres entidades con mayores necesidades son Catalunyabank (10.825 millones), NovacaixaGalicia (7176 millones) y Banco de Valencia (3462 millones).

El memorándum firmado por España con Bruselas en julio para la entrega de una ayuda a la banca de hasta 100.000 millones de euros establecía que las necesidades de capital del 90% del sistema financiero español debían conocerse antes de que termine este mes.

Una vez que concluya el proceso de saneamiento y reestructuración de los bancos, "el sistema bancario español se va a encontrar holgadamente recapitalizado por las actuaciones privadas y la disponibilidad de ayuda pública"', dijo en una conferencia de prensa el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy.

El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, reaccionó con alivio a las cifras del rescate. "Estoy tranquilo porque las necesidades de capital de los bancos españoles se queden por debajo de los 60.000 millones de euros", declaró.

Juncker agregó que el análisis muestra que la cifra de 100.000 millones es "más que razonable" para cubrir las necesidades de capital del sistema financiero, "incluido un margen cómodo de seguridad".

También el Fondo Monetario Internacional (FMI) se mostró satisfecho por la valoración "exhaustiva y transparente" del sector bancario español.

La ayuda acordada podrá atender "holgadamente" las necesidades de recapitalización, dijo la directora del FMI, Christine Lagarde. Esa recapitalización "facilitará la construcción de un sistema bancario más sólido, que con el tiempo ayudará a reactivar los flujos de crédito y a promover el crecimiento y el empleo", agregó.

Ahora, los bancos concernidos tendrán que presentar sus planes de recapitalización al gobierno de Rajoy y a la Unión Europea (UE). Los que necesiten apoyo público para sus planes de reestructuración deberán recibir el visto bueno de la Comisión Europea (CE).

APRUEBAN EL AJUSTE EN FRANCIA

El gobierno francés aprobó ayer en el Consejo de Ministros su proyecto de presupuesto para 2013, que prevé subas de impuestos a los más ricos y a empresas, así como recortes de gastos para cumplir con el objetivo de reducir el déficit al 3% del PBI. El primer presupuesto aprobado durante la presidencia de François Hollande está dominado por el rigor, con incrementos fiscales y ajustes en todas las partidas, excepto en educación, seguridad, justicia y asuntos sociales.