Milagro Sala declaró ante la Justicia y dijo que el gobernador Morales está "resentido"

Milagro Sala declaró ante la Justicia y dijo que el gobernador Morales está

La dirigente se despegó de una protesta violenta contra el mandatario, pero lo acusó de tener "resentimientos porque les enseñamos a los negros y collas a tener dignidad"; irónico pedido de perdón

 

Con varios kilos menos y el pelo largo semirrecogido, campera y botas cortas de cuero y pantalón chupín, Milagro Salase presentó en la primera audiencia por el juicio que se le sigue como presunta autora intelectual de una protesta contra el hoy gobernador Gerardo Morales que en 2009 terminó en destrozos.

La jefa de la Tupac Amaru llegó a la sede del Tribunal Oral Federal a las 7.30, donde fue recibida por unos 50 militantes, acompañada por agentes del Servicio Penitenciario que la trasladaron desde el penal de Alto Comedero, donde cumple prisión preventiva.

Además de Sala, están imputados Graciela López y Roberto Salvatierra, señalados como parte del grupo que se manifestó contra Morales e imputados por los delitos de amenazas coactivas y daño agravado en concurso real.

Sala habló durante 50 minutos ante los jueces Mario Marcelo Juárez Almaraz, María Alejandra Cataldi y Santiago Díaz, tras los descargos de López y Salvatierra, que en 2009 integraban la Tupac. Negó todos los cargos, aseguró que el día de la manifestación contra Morales, que era senador y ese día estaba acompañado por el titular de la Auditoría General de la Nación, ella estaba en Monterrico, a 35 kilómetros de esta capital.

La última pregunta de la abogada de Sala, Elizabeth Gómez Alcorta, dio inicio a un monólogo de una hora. La dirigente acusó a Morales de "armarle causas", de no gobernar y de "no hacerle caso ni a la ONU". Le endilgó, incluso, haberla "perseguido" durante ocho años. Sin embargo, dijo haber "perdonado" al gobernador. "Yo por dentro ya lo perdoné." Y completó: "Le pido perdón a Gerardo Morales por ser negra y colla". Además, hizo un recorrido por su vida, su niñez y el trabajo en la organización social y, una y otra vez, volvió a las acusaciones contra Morales. "Tiene resentimiento porque nosotros les enseñamos a los negros y collas a tener dignidad, y eso no le gusta", lanzó.

En otro tramo de la exposición volvió a tomar distancia de los incidentes. Admitió ser amiga de Graciela López, pero planteó que no puede hacerse responsable de sus actos. "No digo que mis compañeros sean blancas palomitas, pero no puedo controlar a 20.000 personas", se excusó.

A lo largo de la declaración, Sala se mostró calmada, dijo que no iba a llorar porque estaba "fuerte" y afirmó que no se arrepiente de haber ayudado a sus "compañeros".

Entre el público de la audiencia estuvo el titular del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Horacio Verbitsky, con quien la abogada de Sala intercambió miradas durante buena parte del debate.

Tras un cuarto intermedio, la audiencia continuó con la declaración de testigos, uno de ellos un ex integrante de la Tupac, René Arellano, clave para la querella.

Arellano declaró que Sala convocó a una reunión en su domicilio para "organizar" la protesta contra Morales. "Este Morales no cierra el pico, viene por las viviendas, por nuestro trabajo, hay que cerrarle el pico", le dijo entonces, según relató ante los jueces. Siempre según su versión, Sala continuó con un encargo. "Si no cierra el pico con el escrache, con esta pistola [que puso sobre una mesa] vas a tirotear al hermano de Morales."

El juicio proseguirá el lunes con la declaración de otro grupo de testigos.

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