La Justicia concedió la libertad condicional al líder de Quebracho

La Justicia concedió la libertad condicional al líder de Quebracho

Fernando Esteche fue beneficiado por un fallo del juez de ejecución Daniel Obligado. Habían denunciado presiones del Gobierno para acelerar su liberación

Las especulaciones de los últimos días se hicieron realidad y el líder de Quebracho, Fernando Esteche, fue liberado de prisión sin cumplir ni siquiera el 25 por ciento de la pena por tres delitos cuya autoría reconoció. La Unidad 19 de Ezeiza, donde Esteche estaba detenido por una condena unificada de cuatro años y seis meses, recibió este mediodía un oficio firmado por el juez de ejecución Daniel Obligado, en el que ordenó liberarlo. Pasadas las 18, Esteche dejó el penal.

El juez Obligado tomó en cuenta un pedido de la defensa del dirigente de Quebracho, solicitando tomar en cuenta las actividades educativas que Esteche lleva a cabo en prisión, sumado al hecho de que el pasado 20 de noviembre obtuvo su título de Doctorado en Comunicación. Según el artículo 140 de la nueva Ley de Ejecución Penal, por dar clase y por su diploma, a Esteche, que llevaba detenido un año y seis meses, se le computaron además 20 meses cumplidos, por lo que quedó en condiciones de recibir el beneficio de la libertad condicional.

Al salir del penal, Estecho habló con la prensa sobre su situación: "Hubo una intención de escarmiento no solamente contra nosotros como organización sino sobre todo el movimiento popular. Lo que podemos decir con lo enteros que estamos es que lo logramos. Salimos mucho mas fuerte que cuando entramos".

Asimismo, agradeció la "solidaridad y compromiso de la militancia, legisladores, dirigentes políticos y sociales" y disparó: "Esperamos que las cosas estén en su lugar. Sobisch, Cavallo, De la Rúa y María Julia que son absueltos por los jueces que nos condenan que estén en su lugar. Hoy están un poco mas pero no del todo porque ellos están en la calle".

La semana pasada se conocieron presiones del Gobierno para acelerar la libertad de Esteche, una estrategia que incluyó al abogado mediático Fernando Burlando y la rectora de la UNLP, Florencia Saintout. Los magistrados del Tribunal Oral Federal (TOF) 5, que debían darle curso al pedido de liberación anticipada presentado por Burlando,recibieron "aprietes".

"Los llamaron funcionarios de la Secretaría de Derechos Humanos, que depende del Ministerio de Justicia, para decirles que estaban preocupados por las condiciones de detención de Esteche", precisó una fuente judicial con acceso a la causa.

El jefe de Quebracho era un preso con privilegios que muy pocos tienen. Según una denuncia periodística publicada en abril en el diario La Naciónpasó sus días en una de las pequeñas casitas de dos ambientes, con cocina, baño privado y hasta una computadora, que están apartadas de los pabellones del penal de Ezeiza y que casi no tienen vigilancia. El lugar está preparado para los presos que están por ser liberados, pese a que Esteche lleva apenas poco más de un año encarcelado y todavía debe purgar casi tres años y medio de su pena.No está claro quién le concedió esa prerrogativa: desde el Servicio Penitenciario aseguraron que fue el Ministerio de Justicia, pero la cartera que conduce Julio Alak rechazó esa versión.

Lo cierto es que no son pocos los kirchneristas que consideran que Esteche era un preso político. Lo mismo piensan en otros espacios, como la izquierda. El argumento más fuerte es que los criterios que se aplicaron para condenarlo podrían usarse en contra de casi todos los militantes del país. Pero el propio jefe de Quebracho reconoció su culpabilidad. Lo hizo en un juicio abreviado el mes pasado, en el que negoció con la fiscal Stella Maris Scandura una pena unificada de cuatro años y medio de prisión por tres casos: el ataque a un local partidario del ex gobernador neuquino Jorge Sobisch luego del asesinato del maestro Carlos Fuentealba durante una marcha docente –por el que ya había recibido una pena de 3 años y 8 meses de cárcel– y dos escraches más, uno al Ministerio de Economía para repudiar la visita del entonces jefe del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, en 2004; y otro a la embajada de Israel, en 2006. Finalmente, los jueces del TOF 5 Sergio Paduczak y Gabriel Nardiello homologaron el acuerdo, mientras que el tercer miembro del tribunal, Oscar Hergott, lo absolvió.

En realidad, todo se trató de una estrategia judicial que tiene el sello de la Universidad de La Plata, cuyas autoridades son reconocidos simpatizantes del kirchnerismo. De hecho, el apoyo de la casa de estudios a Esteche comienza con la propia rectora y concejal platense Florencia Saintout, que patrocinó una presentación de Quebracho ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, fue la directora de la tesis doctoral de Esteche y le abrió las puertas como docente de la universidad, cuando inventó una cátedra paralela de Relaciones Internacionales y Comunicación, en la carrera de Periodismo, y que por supuesto quedó a cargo del mandamás de Quebracho. Incluso lo autorizó a tomar exámenes desde la cárcel a través de un celular. Y defendió esa insólita decisión.

"Ella fue una persona muy solidaria con la causa de Esteche", reconoció a este medio Facundo Escobar, un militante de Quebracho encargado de aceitar el contacto de la agrupación con la prensa.

No está muy claro cómo hizo Esteche para transformarse en doctor en Comunicación Social. Según explicó Escobar, el condenado jefe de Quebracho aprovechó este año y monedas tras las rejas para terminar su licenciatura en periodismo –le faltaba la tesis– y para finalizar su posgrado, que supuestamente comenzó en 2008.

"¿Cómo es que empezó una carrera de posgrado sin tener uno de grado? Además, y esto es lo más raro, para ser doctor hay que cursar no menos de mil horas cátedra, y el 40% tiene que ser presencial. Quizás Esteche las hizo, pero la UNLP debería aclarar qué pasó", comentó a Infobae una fuente de la institución platense.

Así las cosas, en prisión y ante un jurado de tres profesores, el 20 de noviembre Esteche defendió su tesis doctoral sobre las proscripciones políticas en el país desde 1955. Saintout asistió al acto. Y como era esperable, lo aprobaron y le dieron el diploma que cuando se lo entreguen rezará "Doctor Fernando Luis Esteche".

Esteche convirtió ese título en un boleto a la libertad. Y la estrategia tuvo como patrocinador a Burlando, un abogado que en el mundillo judicial se suele ligar a las causas que tienen en la mira a la cúpula de la policía bonaerense.

De esta forma, con el doctorado bajo el brazo y menos de un cuarto de su pena cumplida, Burlando presentó un pedido para anticipar la salida de Esteche del presidio bonaerense. Se basó en el artículo 140 de la Ley 24.660, que habilita la posibilidad de acortar el tiempo de condena efectiva por hasta 20 meses para los presos que terminan alguna instancia educativa. El escrito fue acompañado por una nota de la UNLP.

A la par, la presión se multiplicó. A las llamadas de funcionarios oficialistas a los magistrados se sumaron dos acampes de los militantes de Quebracho, uno frente al penal de Ezeiza y otro en torno a los tribunales de Comodoro Py. Como corolario, Esteche levantó su perfil y brindó entrevistas en varios medios oficialistas en los que se declaró como un "preso político".

Lo más difícil de explicar y que nadie le preguntó es el vínculo con Burlando, que se hizo conocido cuando defendió en los 90 a "Los Horneros", la banda ligada a la barra brava de Estudiantes de La Plata, que trabajaba para la policía bonaerense y que fue acusada de asesinar al fotógrafo José Luis Cabezas. En su momento, el abogado terminó reconociendo su relación con el entonces jefe de la DDI de La Matanza, el comisario Mario "Chorizo" Rodríguez, cuya figura es un emblema de la "maldita policía".

Consultado sobre la designación de un abogado que parecería ser la antítesis de los postulados que supuestamente promueve Quebracho, el contacto de la agrupación con los medios respondió a Infobae: "Es el defensor de Esteche, nada más. Se lo eligió por una cuestión puramente jurídica, porque necesitábamos a alguien que conociera la lógica judicial desde adentro". Igualmente, aclaró que está trabajando ad honorem y que fue acercado a Quebracho por "conocidos en común" con el condenado. Ambos son de La Plata.

No obstante, el vínculo de Quebracho con Burlando bien pudo establecerse a través de la UNLP y Florencia Saintout. Uno de los sicarios de "Los Horneros", Horacio Braga, que participó del homicidio del reportero de la revista Noticias, estuvo el mes pasado en una sesión del Concejo Deliberante platense en la que la rectora de la UNLP y edil presentó un proyecto que impulsa la inclusión laboral para ex convictos y personas en libertad condicional. Braga, atento, la aplaudió.

Las contradicciones están la vista: Saintout se suele proclamar como una defensora de la libertad de prensa y el horrendo crimen de Cabezas fue uno de los ataques más feroces contra el periodismo desde el retorno de la democracia. Por eso la concejal intentó despegarse de Braga en un comunicado, que llegó tarde, después de que el escándalo trascendiera en los medios.

Aunque Quebracho niegue su adhesión al kirchnerismo, no es una agrupación opositora. Y la simpatía con la militancia más dura del oficialismo nacional existe. El propio Esteche reconoce su intención de formar un frente político más amplio y se habla de la posibilidad de aliarse con el Movimiento Evita y la Túpac Amaru de Milagro Sala. Ahora el dirigente de Quebracho ya piensa en el futuro. Con la ayuda de Burlando, Saintout y compañía, celebrará el Año Nuevo en su casa.

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