Los costos de los empresarios para acceder a insumos quedaron por encima de los precios al consumidor por segundo mes consecutivo, según reveló el Indec. El Índice de Precios Internos la por Mayor (IPIM) tuvo una suba de 7% en julio, 0,7 puntos arriba del IPC de 6,3% del mismo mes. Si bien presentó una desaceleración de 0,5 puntos respecto a junio, la suba del dólar del 22%, que rápidamente se trasladó tanto a precios como a costos, presionará en agosto y se esperan fuertes subas. Las empresas, además, llegaron a esa devaluación con remarcaciones contenidas.

A pesar de que la suba de los precios mayoristas fue más alta que la de los minoristas en julio, en el acumulado (57,7%) y en la variación interanual (112,7%) esa tendencia se revirtió y quedó por debajo del IPC que se ubicó en 60,2% y 113,4%, respectivamente. Sin embargo, en los dos últimos meses esa brecha se achicó.

Desde ACM señalaron al respecto: "Si comparamos la inflación mayorista interanual (112,7%) con la minorista (113,4%), podemos contemplar que la diferencia entre ambas se fue reduciendo en los dos últimos meses. De hecho, en el mes de análisis, la inflación minorista fue solo de 0,7 puntos superior a la mayorista, mientras que en junio esta diferencia había sido de 2,7 puntos".

En el IPIM, la suba mensual estuvo liderada por los productos importados que se incrementaron en un 7,7%, 0,7 puntos arriba de la media, y marcaron un aumento de 156% contra julio de 2022, una variación muy por arriba de la inflación general anual. Sin embargo, los importados marcaron una desaceleración de 2 puntos respecto del 9,7% de junio. Esa baja puede revertirse en agosto cuando impacte el nuevo impuesto PAÍS para los bienes importados y la devaluación. 

Al respecto, la consultora ACM destacó que "a pesar de que en el mes de análisis, la variación interanual de Productos importados se redujo levemente respecto a la de Productos Nacionales, esta última sigue muy por debajo de la de Productos importados". En julio fue de 7%. 

Por su parte, la devaluación llevó a $350 al dólar al que pueden acceder los importadores para traer insumos. El encarecimiento del tipo de cambio se trasladó rápidamente a los precios y presionará tanto el IPIM como el IPC de agosto. 

La consultora LCG advirtió que para lo que queda del 2023 "esperan un aumento de los precios mayoristas", presionados por "una fuerte suba de los Productos Importados por la devaluación fiscal y real que se dio en julio y agosto". "Si el resto de los componentes acompaña la dinámica de los precios internos, la inflación mayorista marcaría una variación cercana al 160% anual a diciembre", destacó, en sintonía con el 150% que se espera para la inflación minorista anual.