Aun año del atentado contra Cristina Fernández de Kirchner, el dirigente social Juan Grabois dijo que los elementos arrojados por la investigación “se enlazan con los dos candidatos principales de la ultraderecha argentina”, en una referencia concreta a Javier Milei y Patricia Bullrich. "Hay una firme voluntad judicial de que el atentado quede impune", denunció.

El ex precandidato presidencial por Unión por la Patria también mencionó a “ciertos dirigentes muy relevantes de la actual oposición política, como el señor (Gerardo) Milman” y denunció como “la principal estructura de financiamiento” a los primos Luis y Nicolás Caputo “de evidentes vinculaciones con el macrismo”.

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Además de repasar la vinculación del llamado grupo de los Copitos, apuntó a la Justicia al remarcar “la negligencia y complicidad de jueces y fiscales” en la investigación del intento de homicidio de la vicepresidenta, el 1 de septiembre de 2022, frente a su casa de Recoleta. El eje central de la crítica: la elevación a juicio de los autores materiales sin profundizar en las vinculaciones políticas y económicas, que los abogados de la vicepresidenta llamaron la "pista Milman".

Gerardo Milman.

"Queremos dilucidar las dos preguntas fundamentales: quién atentó contra Cristina Kirchner y por qué. Para nosotros fue el clímax en un proceso con un objetivo muy claro: descabezar, desorientar y desarmar al campo popular argentino, generando un hecho heroico que desinhibió a las fuerzas reaccionarias que dicen que quieren destruir al Estado", pronunció Grabois.

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Los sospechosos hechos previos al ataque

El dirigente social y político dijo que tras la condena en contra de la vicepresidenta, quedó proscripta, "el peronismo terminó en una situación de absoluta debilidad y las fuerzas de ultraderecha lograron avanzar hacia posiciones insospechadas". 

Más adelante, Grabois señaló que días previos al atentado perpetrado por Fernando Sabag Montiel el 1° de septiembre a la noche, "hubo una sucesión de maniobras de inteligencia con epicentro en el departamento de la vecina, la señora Pinto. Un mes de tareas de inteligencia de estos copitos que lograron recorrer Recoleta".

Por otra parte, el precandidato a presidente de Unión por la Patria también cuestionó el ol de la Policía de la Ciudad en los días previos al ataque. "El accionar fue turbio, incluyó agresiones contra el diputado Máximo Kirchner, el gobernador, la presencia de un cargador con balas en las inmediaciones de la casa de Cristina Kirchner el día del episodio de las vallas", sostuvo.

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Y, respecto a ese punto, agregó: "Hay complicidad o simpatía bastante explícita entre la Policía y los grupos radicalizados".

"Tres vínculos clave"

En un video de casi 20 minutos, el dirigente también señaló que "en los grupos de comunicación de Revolución Federal se hablaba abiertamente de matar a Cristina Kirchner". En ese aspecto, recordó el caso de Lidia Casciano, la mujer apodada "Dali Revolución", a quien según Grabois "no querían identificar y ofreció su arma para matar a Cristina. Arma finalmente secuestrada en el marco del allanamiento". 

"El atentado no fue una accióna aislada", dijo Grabois.

"Impulsaban abiertamente una acción equivalente a la que terminó impulsando Sabag Monetiel", afirmó.

Por otra parte, desarrolló lo que para el son "tres vínculos claves". Mencionó el episodio en el que Milman le contó sus asesoras en el bar Casablanca que "cuando la maten voy a estar camino a la costa", el borrado de los celulares de ambas mujeres en oficinas del Instituto de Patricia Bullrich y aseguró que "la corporación Caputo les entregó por lo menos 15 millones de pesos" a Revolución Federal. 

Pero no dejó afuera a la familia Posse. "El lugar en el que Revolución Federal instaló la carpintería y su centro operativo funcionaba anteriormente un centro de jubilados. Es una propiedad vinculada históricamente a los Posse, que con Macri realizó un acto proselitista en 2016".