La propuesta es que el canon esté atado al precio del barril de petróleo. También pidieron que se actualicen los valores de las multas a las operadoras.

Luego de la reunión de la parte técnica de la OFEPHi de la semana pasada, realizada en Mendoza, las diez provincias petroleras del país reclaman al gobierno nacional que la actualización del canon de exploración y explotación se ajuste con el valor del barril de petróleo. Además, plantearon también la actualización del monto de las multas a las petroleras ante eventuales infracciones.

“La idea es que no esperemos una resolución de la Secretaría de Energía para que se actualice el valor del canon, sino que directamente esté atado mediante una fórmula con el valor del barril de petróleo”, explicó el ingeniero Carlos Lambré, secretario ejecutivo de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (OFEPHi).

El valor del canon de exploración y explotación que reciben las provincias por parte de las empresas productoras de hidrocarburos lo actualiza la Secretaría de Energía, pero eso no ocurre desde el año 2014.

“La finalidad del canon es que las empresas no mantengan eternamente las áreas sin operar ni invertir, sino que les convenga más devolver esas áreas (remanentes) o invertir que pagar un canon anual por kilómetros cuadrado sin hacer uso del área”, explicó Lambré.

El canon es un valor que se les cobra a las empresas petroleras por las áreas que se les otorga en las concesiones para que realicen actividades de exploración y explotación. En el caso del canon de exploración el monto varía de acuerdo al período en que una empresa se encuentre. En los tres años de inicio de la exploración el canon es de 250 pesos por km2. En el segundo período (también de tres años) es de 1.000 pesos por km2. Las empresas que piden prórrogas de exploración (5 años) para áreas que no están invirtiendo, abonan un canon de 17.500 pesos por km2.

En cuanto al canon para la explotación de áreas, las empresas pagan a las provincias 4.500 pesos por km2. Para las áreas remanentes es el mismo monto.

“No nos interesa tener un canon alto, sino que queremos que las áreas que no son utilizadas por las empresas sean devueltas para que otras compañías las exploren o exploten. No queremos que haya áreas sin invertir o explorar por parte de las operadoras. Queremos que haya inversiones”, describió el secretario ejecutivo.

Desde la OFEPHi aún no definieron cómo se implementaría y en qué porcentaje, pero las diez provincias petroleras acuerdan que el canon se ajuste anualmente con el precio del barril de crudo.

La parte política de la organización, donde participan generalmente los gobernadores provinciales, no se viene reuniendo. Se trata de las provincias de Chubut, La Pampa, Jujuy, Formosa, Neuquén, Rio Negro, Mendoza, Salta, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Los gobernadores tampoco tienen planeado reunirse a futuro. El año pasado hubo un intento de renovar el aire político de las provincias petroleras, pero fracasó y la presidencia de la OFEPHi continúa en manos del gobernador de Chubut, Mariano Arcioni.

El Comité Ejecutivo de la OFEPHi, la parte técnica, se va a reunir el 12 de diciembre. Luego del encuentro donde revisarán más en fino las cuestiones técnicas, las provincias petroleras llevarán los pedidos a la Secretaría de Energía, a cargo de Javier Iguacel.

Actualización de las multas

“Las multas a una operadora es por un error o irregularidad. El problema es que los valores están tan atrasados y son tan bajos que hay operadoras que prefieren pagarlas. Lo que queremos es que las empresas vean que conviene operar bien a pagar una multa”, indicó Carlos Lambre.

Las multas van de 25 m3 a 2.000 m3 de petróleo, según la falla o la irregularidad que una operadora haya cometido. Desde la OFEPHi quieren que se invierta para que no haya errores o fallas en la operación con valores de multas más elevados. Las provincias petroleras van a plantearle al gobierno que se estandaricen los valores de las multas para todo el país y que no dependa de cada provincia, donde cada una tiene valores distintos, como ocurre ahora.