La izquierda regional busca aprovechar el impulso dado por la irrupción del espacio en las recientes PASO tanto de Salta como de Mendoza, y en el caso de Avellaneda, están dispuestos a superar el 5,8 por ciento alcanzado en las últimas elecciones yendo a la caza del voto en blanco que en el ámbito distrital significó 6.400 sufragios. Justamente esta intención será reforzada en esta campaña, teniendo en cuenta que hay un diferencia de 5 mil votos para hacer posible el ingreso de un legislador de izquierda. “Salta es la expresión de lo que pasó en Buenos Aires. El millón de votos en todo el país fue ratificado en estas PASO salteñas con la posibilidad de que ingresen 4 diputados provinciales, 5 concejales y una senadora. Hay un giro político para la izquierda con un programa basado a lo que reclaman los trabajadores y la ciudadanía. Esta es la opción que planteamos con el derrumbe de partidos patronales”, señaló a LA TERCERA Norma Giménez, candidata a primer concejal por el Frente de Izquierda en Avellaneda.

“Estamos recogiendo un trabajo político y militante realizado en el interior. Creo que estas elecciones influirán para las del 27 de octubre porque la población empieza a ver que la izquierda es una cuestión viable. Con este millón de votos, Néstor Pitrola ya está adentro del Congreso. En la Provincia iríamos con dos, sumado a la entrada de Jorge Altamira como diputado por la Capital Federal”, indicó mientras que el espacio confía en una mejor fiscalización que, según indicaron, la falta de refuerzo en las recientes PASO hizo que en Isla Maciel se puerdan 300 votos.

Por otra parte, Giménez manifestó una serie de críticas que apuntan contra la gestión del intendente Jorge Ferraresi, por sobre todo en materia de seguridad: “En el distrito tenemos 5 fuerzas de seguridad. Parece que se cree que a la delincuencia se la combate ganando espacio por metro cuadrado. Con la Policía Comunal, Avellaneda suma su quinta fuerza junto a la Bonaerense, la Bonaerense 2, Gendarmería y Prefectura. Cada una de ellas con probado currículum de inoperancia y cero efectividad en control y prevención del delito”.

“Nadie explica por qué fracasaron las anteriores. Tampoco se explica por qué está nueva fuerza garantizaría la seguridad de los vecinos, mientras las características de las existentes las han convertido en un lastre por su connivencia con el delito, por los aparatos corruptos desde sus cúpulas que, manteniendo zonas liberadas, garantizan la impunidad del delito o al accionar de la represión ante la intervención de los vecinos y trabajadores. La inseguridad sigue presente en Avellaneda”, indicó la dirigente del Frente de Izquierda.

-¿Cuál es la propuesta?

-Mayor participación de los vecinos con intervención de seguridad municipal. Si a vos te convocan a un foro de seguridad para que estés solo sentado, quedamos en lo mismo ya que son los mismos policías que terminan controlando todo. Ahora si desde una secretaría de seguridad se convoca a que se informe sobre el manejo de las comisarias, sus registros y balances, sería otra situación. Es el control real debe ser de los vecinos. Esta iniciativa se debe tomar desde del Concejo Deliberante.

-¿Qué opina de la “campaña sucia que se viene llevando adelante en Avellaneda?

-Alguien me dijo desde las fuerzas massistas que ven que “la cosa está picante”. El massismo se presenta como el recambio, pero desde sus filas internas se agreden con nombre y apellido, o sea que se conocen, saben de dónde vienen, porque todos ellos ya habían participado de lo mismo. Hoy el Concejo Deliberante en todas sus versiones son los mismos que están en la política oficialista desde los 90. Por eso la entrada de la izquierda modificará esa situación. Además, veo que todo es “teatro” al decir que discuten como opositores, aunque en realidad se discute qué sector es el que va a llevar adelante el ajuste. (Armando) Bertolotto dice “Massa soy yo”, pero en realidad es igual que los demás. Después del 27 este teatro de opositores va a acabar.

-Hubo mutaciones en el Concejo y espacios que ya no están, ¿qué opina?

-Es como el juego de la sillita. Lo que sucede, es que el oficialismo cooptó a los que venían independientes, como Isabel Rodríguez o Maia Lata. Votaron siempre acompañando. Lo que no hay es un balance: por qué se acompaña o por qué se vota en contra. ¿Qué pasó con el estacionamiento medido? ¿Qué pasó con los dineros que entraron y salieron?

-¿Hay poca trasparencia?

-Poca información, no solo desde la gestión de Ferraresi sino también en el Concejo Deliberante. El otro día estuve con (el UCR) Rodrigo Galetovich en un encuentro, pero él es concejal desde el 2009, ¿qué viene a denunciar a Ferraresi entonces? No solo con denuncias se debe quedar. Se tiene que ir por más. Hay que apoyar lógicamente las cosas que se hacen bien, pero cuando no hay fundamente y deja traslucir la poco transparencia, como por ejemplo pasa con el presupuesto y los superpoderes del intendente para asignar las partidas de dinero a su antojo. Por eso la izquierda tiene que entrar para modificarlo. El Legislativo debe tener más comunicación con la gente. No se sabe cuándo son las sesiones y si son abiertas. No sabemos tampoco cuándo hay reuniones de mayores contribuyentes.