Es una primera proyección conocida en las últimas horas como secuela del decreto del Poder Ejecutivo nacional. La supresión del llamado “fondo sojero”, que el año pasado derramó unos 1.300.000.000 de pesos e iba a repartir otros 2.000.000.000 de pesos a lo largo de 2018 en los 135 municipios bonaerenses resentiría, además, las arcas de los partidos de Lobería y San Cayetano.
La reducción de ingresos, por diversas medidas de carácter nacional y provincial, más la supresión de la “tasa portuaria” –de tinte local-, indicaría que la comuna de Necochea vería menguado sus ingresos en el presente ejercicio en casi 200.000.000 de pesos. La decisión del gobierno nacional de eliminar el conocido “fondo sojero” estaría produciendo un ingreso menos de casi 1.000.000.000 de pesos a los numerosos municipios de la Provincia de Buenos Aires, de acuerdo a las iniciales proyecciones realizadas en las últimas horas. Este dato está pendiente de una corrección, habida cuenta que la norma emanada desde el Poder Ejecutivo determinará que el no remito de fondos de aquí a fin de año, pero ya habiendo percibido parte de los recursos por este concepto en el transcurso del primer semestre y pico de 2018. El secretario de Hacienda y Finanzas Públicas de la Municipalidad de Necochea, licenciado Sebastián Serrano, expresó ante una consulta que “por este fondo teníamos previsto percibir durante todo este 2018 una partida cercana a 12.500.000 pesos. Según el último corte realizado, a nuestro distrito se la remitido un recurso por este concepto de 8.300.000 pesos. Lo que quedaría sin recibirse sería un dinero cercano a 4.2000.000 pesos, con el añadido de que para 2019 creemos que no se lo podrá contar en su totalidad”. El funcionario del Departamento Ejecutivo local dio cuenta asimismo que, consecuencia de los diversos recortes que se vienen registrando en cuanto a ingresos a comunas de la Provincia, más “la desaparición de la tasa portuaria” que tuvo un carácter netamente local, Necochea estaría dejando de percibir un monto global de casi 200.000.000 de pesos. Una de las muchas crónicas que se han redactado por estas horas en atención a la eliminación producida este año del denominado “fondo sojero”, fechadas muchas de ellas en la ciudad de La Plata, capital bonaerense, indica lo siguiente: “La fuerte medida de ajuste que impactará de lleno en los municipios bonaerenses y seguramente causará hondo malestar en propios y extraños. Se trata de la eliminación del llamado “fondo sojero”, que derramó unos 1.300 millones de pesos en 2017 e iba a repartir otros 2 mil millones a lo largo de 2018 en los 135 municipios bonaerenses. En llano, la idea del presidente Mauricio Macri y de su ministro de Hacienda, Nicolás Caputo, es ahorrar a través del gasto de los municipios y las provincias. O, mejor dicho, hacer “rendir más” la recaudación de la soja, sin tocar el bolsillo de los productores ni el de los exportadores. La medida forma parte de un paquete que busca generar un ahorro de 12.500 millones de pesos para lo que queda de 2018 y 53 mil millones de pesos para 2019, sin dejar de reducir las retenciones a la soja. El decreto reduce el 66% el monto total pagado en concepto de reintegros a la exportación, de acuerdo a un esquema diferenciado por producto y confirma la tendencia a la baja en la alícuota de los granos de soja. Pero lo más sustancioso en términos políticos es la eliminación, mediante de Decreto de Necesidad y Urgencia, el Fondo Federal Solidario, conocido como “fondo sojero”, que reparte a Provincias y Municipios el 30% de la recaudación de los derechos de exportación a la soja. En el Gobierno consideran “innecesaria la continuidad de este mecanismo de compensación”. En el plano provincial, la decisión de Mauricio Macri y Nicolás Dujovne significa que las comunas bonaerenses dejen de percibir unos mil millones de pesos de aquí a diciembre. En 2017, el Fondo Sojero derramó 1.300 millones de pesos en 12 meses. Hasta ahora, había distribuido 1.032 millones. En proporción, implica el 2 por ciento de la coparticipación bonaerense. Se descuenta que habrá malestar en las comunas, no sólo por una medida de ajuste unilateralmente decidida por Nación, sino porque los ingresos vía FFS están calculados en los presupuestos anuales, con lo cual ellos también se verán forzados a implementar ajustes.
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