Comer una picada es 5 veces más caro que hace 4 años

En los últimos cuatro años, el poder de compra de los argentinos cayó un 20%. Un informe de FADA reveló que una picada con pan, salame, queso y jamón cocido para cuatro personas vale más de $ 1.400, cuando en 2018 no superaba los $ 400.

La inflación de 3,9% en enero que informó el Indec tiene un impacto directo en tú vida. Si los salarios no aumentaron un 3,9% en enero, cuando cualquier persona vaya a la panadería va comprar menos pan. Esta pérdida del poder adquisitivo es la que analizó la  Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA) al comparar la variación del precio de una picada para 4 personas en los últimos cuatro años.

"Para armar este cálculo pensamos en una juntada entre amigos o familia, en la previa a un partido o el reencuentro después de un tiempo sin poder vernos. Tuvimos en cuenta el queso, el fiambre, el pan, la cerveza, la gaseosa, cosas que no faltan nunca", explicó David Miazzo, economista jefe de FADA.

A finales de 2017 una picada con salame, queso, pan, cerveza, gaseosa y jamón cocido para cuatro personas costaba $300. En 2022, se necesitan como mínimo $1450 por los mismos productos. 

"Con esto calculamos que en cuatro años el billete de $1000 perdió la capacidad de comprar casi 4 kilos de jamón cocido, 3,300 de salame, 3,300 de queso pategrás, 20 kilos de pan, 18 botellas de cerveza y 17 botellas de gaseosa",  agregó Miazzo.

En detalle, con $1000 en diciembre de 2017 se compraban 4 kilos de queso pategrás ($247). Hoy sólo se compran 700 gramos ($1.340). Con el fiambre sucedió lo mismo: en 2017 se compraban 4,7 kilos de jamón cocido ($213) o 4 kilos de salame ($257). Actualmente no alcanza ni para un kilo de ninguno de los dos (jamón $1.140 y salame $1.360).

Entre los bienes de consumo afectados por la pérdida de poder adquisitivo, los alimentos son uno de los que más evidencia el impacto de la inflación en los bolsillos. La suba de este rubro fue casi del 5% en enero, la mayor desde que asumió Alberto Fernández, presionado por los estacionales.

Entre diciembre de 2017 y finales de 2022, el poder de compra cayó un 20%, de acuerdo al Índice de Salarios que publica INDEC. Esto quiere decir que de cada $1000 que consumíamos en diciembre de 2017, en la actualidad se puede consumir el equivalente a $800.

Los economistas de FADA afirman que "para dejar de imprimir pesos es necesario contar con equilibrio fiscal. Los gobiernos tienen que dejar de gastar más de lo que recaudan por impuestos, no hay otra opción que controlar el gasto público para controlar la inflación".

Comentá la nota