Arcor sufre el covid y precios congelados: sostiene resultados por el ajuste de gastos

Arcor sufre el covid y precios congelados: sostiene resultados por el ajuste de gastos

Informó una ganancia de $1.129 millones, con ventas por $72.102 M. La mejora contra 2019 es por baja de costos.

El Grupo Arcor, una de las alimenticias más grandes de la Argentina, sufre las consecuencias de la pandemia y el congelamiento de precios establecido por el Gobierno. Así, sus resultados contables siguen lejos de lo deseado, pero no son peores gracias a la política de ajuste de gastos que vienen aplicando desde 2019.

Arcor presentó el viernes último sus resultados contables ante la Comisión Nacional de Valores, dado que es una empresa que emite deuda en el mercado de capitales. En julio de este año, por ejemplo, logró captar $2.500 millones a través de Obligaciones Negociables por las que pagó tasa Badlar más 1,99%, para financiar su operación.

En un comunicado de prensa la compañía destacó unos pocos números. “Grupo Arcor finaliza el primer semestre al 30 de junio de 2020 con ventas por 72.102 millones de pesos y un resultado final de 1.129 millones de pesos, valor que representa el 1,6% de las ventas consolidadas. Las operaciones de Argentina, que incluyen las exportaciones a terceros, representaron el 73,3% de las ventas consolidadas, mientras que las de sociedades del exterior completan el 26,7% restante”, precisó.

El parte de prensa, que repite los mismos párrafos que el emitido en mayo pasado al informar los resultados del primer trimestre, admite que la variable de ajuste pasó por el recorte de gastos: “La performance alcanzada refleja una mejora en relación al mismo período del año anterior, gracias a diferentes acciones llevadas a cabo durante el 2019, cuando el Grupo aplicó fuertes políticas de contención de costos fijos y un estricto control de los niveles de stock, logrando capturar eficiencias operativas desde inicios del 2020, con un adecuado manejo del capital de trabajo”.

También reconoce el impacto de la pandemia sobre sus ventas, a pesar de que los alimentos fueron uno de los pocos consumos que mantuvo su nivel por ser de primera necesidad: “Es relevante mencionar que el escenario para el desarrollo de los negocios del Grupo cambió en virtud de la situación epidemiológica relacionada al brote del covid-19, viéndose afectados los volúmenes de ventas de algunos de sus negocios, principalmente en el exterior”.

Los $72.102 millones de ventas informadas por Arcor en el primer semestre reflejan una caída de casi 7% con relación a las ventas registradas en el mismo período del año pasado.

Algunas de las subsidiarias de Arcor vienen registrando caída de ventas desde antes del inicio de la cuarentena. Como la láctea Mastellone (de los productos La Serenísima), donde Arcor tiene 49% del capital, perdió casi $1.200 millones en el primer semestre.

En total, Arcor el viernes envió a la CNV 24 notificaciones en apenas unas horas, con los resultados de su participación en subsidiarias y asociadas en los países antes citados y también en Suiza, Estados Unidos, Paraguay, Colombia, México y Uruguay.

Entre esos envíos figuró un “hecho relevante” con los estados financieros intermedios condensados consolidados de dos carillas. Y otro envío de 47 carillas con los estados financieros condensados individuales.

Allí se observa que los $1.129 millones que Arcor cita en el comunicado están conformados por una “ganancia neta del período” de $607,7 millones atribuible al accionista, más $521,6 millones atribuibles al interés no controlante. Al descontar otros resultados integrales del período, la ganancia vira a pérdida por $1.335,3 millones.

Igual, los resultados netos representan una mejora contra 2019, año que si bien registró pérdidas demostró una performance superior a la del año anterior.

Arcor, con sede en Córdoba, es una multinacional argentina, con fábricas en Argentina, Brasil, Chile, México y Perú. Y próximamente abrirá otra en Angola. Además de alimentos, tiene intereses en sectores como el papel, celulosa, servicios financieros, inmobiliarios y hotelería.

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