No nos regalan nada, todo lo contrario, aseguran cerca de la gobernadora María Eugenia Vidal . Contra lo que podría suponerse, la mandataria provincial no recibe un trato "de privilegio" por ser "del propio palo" del presidente Mauricio Macri. Al menos eso dejó trascender la propia Vidal cuando le preguntaron, en la intimidad, cómo son las reuniones con los gobernadores cuando se habla de cifras y potenciales créditos u obras. "Yo voy siempre con mis carpetitas y mis numeritos, no como otros", afirmó la mandataria a quienes la escucharon en los últimos días. En eso se distanció de su colega de Santa Cruz, Alicia Kirchner , que según el Gobierno "esconde" sus números, ya que no existe ley de acceso a la información en esa provincia, frenada por el propio kirchnerismo. Confiada, Vidal dice tener fondos propios "hasta diciembre" para pagar sueldos y demás gastos del estado provincial.La trastienda de la política

Un juez complicado, pero que dice tener "contactos políticos" para defenderse

La denuncia por amenazas presentada contra el titular del Juzgado Civil y Comercial N° 9 de San Martín, Paulo Maresca, se ha convertido en la comidilla del edificio de los tribunales de esa localidad del conurbano bonaerense. Es que la demanda fue iniciada por su colega Elina Fernández, a cargo del Juzgado Civil y Comercial N° 10. Pero más aún porque podría convertirse en un búmeran con consecuencias políticas. Es que, según consta en la causa, Maresca se jacta de tener contactos que lo protegen, ufanándose de contar con el respaldo del Colegio de Abogados y de "políticos", entre los que menciona al diputado y líder del Frente Renovador, Sergio Massa. Ésta no es la primera denuncia que protagoniza el magistrado, sobre el que pesan acusaciones por maltrato y abuso de poder contra el personal de su juzgado.