Por primera vez, el gobierno de María Eugenia Vidal designó más magistradas mujeres que hombres en el poder judicial provincial. En 2018, el 52% de los nombramientos de jueces, fiscales, defensores oficiales y asesores tutelares, fueron ocupados por magistradas mujeres . Y el 48% restante correspondió a hombres. De esta manera, se logró romper con el tradicional predominio masculino en el poder judicial bonaerense. Un terreno árido, y de acceso difícil para las mujeres, no sólo en Buenos Aires. Por eso, Elisa Carrió presentó un proyecto de ley para que haya cupo femenino en la Justicia a nivel nacional.

"Detrás de estas cuestiones hay decisiones políticas. Ha habido una decisión de María Eugenia Vidal de generar una mayor participación de mujeres en toda la magistratura. La gobernadora percibió que había un desequilibrio enorme y nos lo transmitió al Ministerio. Era una justicia solo de hombres. Necesitamos incentivar políticas de género, porque la participación de mujeres no se da por sí sola. Fuimos cubriendo las vacancias, que eran muchas. Revertimos la tendencia de manera gradual", explicó a LA NACIÓN el ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari . El plan del Gobierno provincial es continuar con esta medida y profundizarla.

Al comenzar el gobierno de Vidal, las designaciones de magistrados estaban lejos de la paridad. Sólo el 37% de los nombramientos en la Justicia en 2016 alcanzaban a las mujeres. La abrumadora mayoría de las designaciones (63%) correspondían a los hombres. Durante la gestión de Daniel Scioli , los años 2014 y 2015 fueron aún peores. La inequidad era notoria. El 68% de los designados eran profesionales masculinos. Las mujeres no superaban el tercio (32%). Los años anteriores del mandato de Scioli son similares. En todos los casos, prevalece una composición desigual, a favor de los hombres.

 

 Equidad de género en las provincias11:03

 

El camino hacia la paridad se logró a través de consensos entre los distintos organismos involucrados en el proceso de designación de magistrados. "La iniciativa del Ejecutivo fue muy bien recibida por el Consejo de la Magistratura de la provincia. La Corte Suprema y la Procuración de la provincia, que encabeza Julio Conte Grand , también fueron muy receptivas. Ha habido una idea conjunta de avalar y acompañar este pedido de equilibrio", indicó Ferrari.

Hoy, Hilda Kogan es ministro de la Corte Suprema de Justicia bonaerense. Y en 2016, fue designada Florencia Budiño, la primera mujer jueza del Tribunal de Casación Penal bonaerense. Además, hay mujeres en cargos de jerarquía en el Servicio Penitenciario Bonaerense. "Por primera vez en 150 años, dos mujeres son jefas de los complejos de Olmos y Batán", dijo Ferrari.

Sin embargo, la economista especializada en temas de género, Candelaria Botto, duda de la continuidad de estas medidas: "Si hubiera un cambio de gobierno, podría modificarse esta medida. La decisión de incluir más mujeres puede quedar sujeta a discreciones. Sería ideal un cupo, porque fija un piso", afirmó.

Según proyecciones del Indec, la población argentina hoy está compuesta por un 51% de mujeres y un 49% de varones. Además, las mujeres completan el nivel universitario con mayor frecuencia. Según el censo 2010, el 54,7% de los graduados en universidades fueron mujeres.

"El techo de cristal es una variable objetiva: las mujeres estamos subrepresentadas en los espacios de decisión. Pasa en la Justicia, y en los ámbitos privados y públicos. Cuando vemos los niveles de calificación de las mujeres, tendemos a terminar más carreras universitarias que los varones", explicó Botto.

"En general, a las mujeres se les hace difícil compaginar la vida académica y laboral con la vida familiar. Por eso, suelen tener menor puntaje en los concursos del Poder Judicial federal que los varones. Por suerte, de a poco se está revirtiendo la tendencia", afirmó Clara Santamarina, coordinadora de la ONG La Casa del Encuentro, al referirse al escenario a nivel nacional.