El secretario de Gobierno de la Capital, Hernán Martel, salió al cruce la concejal Liliana Barrionuevo (F3P), quien había dicho que si las cuentas del municipio están bien, "no hay apuro por declarar la Emergencia Social". Martel se mostró de acuerdo con la edil, pero dijo que el proyecto del Ejecutivo apunta "a paliar la profunda necesidad de los vecinos" y agregó que la situación laboral es preocupante. En el mismo sentido se expresó el intendente, Raúl Jalil.

"Estoy de acuerdo que las cuentas del municipio están equilibradas, pero la Emergencia Social apunta a paliar la profunda necesidad que viven mucho vecinos”, dijo Martel en respuesta a Barrionuevo, quien los criticó por "presentar un proyecto tirado de los pelos".

El secretario planteó que los grandes conflictos que motivan el proyecto de Emergencia son el desempleo y las adicciones: "Tenemos más de 6000 solicitudes de empleo que no podemos solucionar. Estamos en una verdadera situación de crisis y tenemos que lograr herramientas urgentes que nos ayuden a apuntar hacia estos sectores y tomar acciones en el tema drogadicción", explicó.

Sobre estos puntos, Martel detalló: "Las estadísticas nos marcan altos índices de desempleo con mucha demanda de pedido de asistencialismo y una fuerte presencia de jóvenes con graves problemas de adicciones".

Con ese panorama, el secretario expresó que desde el Ejecutivo Municipal consideran "necesario" declarar la Emergencia Social. "El proyecto fue enviado al CD hace más de dos meses. Ya estamos trabajando porque consideramos que tenemos que actuar rápidamente, por eso ya hemos determinado el lugar donde funcionará el Centro de Atención a Personas con Problemas de Adicciones", comentó.

La concejal Liliana Barrionuevo criticó el proyecto de la Emergencia Social en varias oportunidades. El viernes pasado dijo que los concejales piden informes económicos al Ejecutivo "para saber con cuánto dinero cuenta el municipio" y planteó que "en el proyecto no se habla de montos, y no podemos autorizar un cheque en blanco".