Por: Ramón Olivares.

CASTELLÓ. Con ello, Mosaiq acaba de desprenderse de sus activos en la gestión de residuos, una labor en la que decidió desinvertir tiempo atrás. De hecho, fue Simetría la que acabó por hacerse con esta rama de negocio al comprarle la participación en Tratamientos y Técnicas Medioambientales (Tetma) a la firma de Roberto Centeno y Aritza Romero a principios del año pasado. De hecho, desde el grupo controlado por la familia Batalla remarcan que, pese a desprenderse de RPB, continúan manteniendo interés en la gestión de residuos, para lo cual se seguirán presentando a licitaciones. 

El principal activo del que se desprende Mosaiq (con una ligera participación mayor de Atitlan que de Simetría) con la venta de RPB es la planta de tratamiento de Algimia de Alfara, que presta servicio a medio centenar de municipios valencianos. Pero no solo, ya que hasta allí trasladan también basuras otras plantas de consorcios vecinos y la firma se encarga asimismo (y concurre a concursos) de labores de transporte de residuos. 

Urbaser, comprada por 3.500 millones

Con la compraventa, materializada a través de la firma Unanimitas Gestión, Urbaser aumenta su presencia en la Comunitat Valenciana. Recientemente se ha hecho, en una UTE con Cespa, con el megacontrato de basuras y limpieza de Vila-real para los próximos ocho años. La firma madrileña, que nació de Dragados, perteneciente al grupo ACS, fue adquirida hace poco más de un año por el fondo inversor americano Platinum por 3.500 millones de euros.