El Presidente no ve margen para ceder y estudia más cierres con aval de Larreta y Kicillof

El Presidente no ve margen para ceder y estudia más cierres con aval de Larreta y Kicillof

Considera que está en el camino correcto, tras ver de primera mano desoladoras postales en Europa. Kicillof presiona por un "cierre fuerte"; Larreta considera cerrar escuelas, y otros distritos aplicar más limitantes.

 

Llegado al país el sábado a la mañana de una gira de una semana por Europa, el presidente Alberto Fernández dedicó el primer día de retorno a la rutina a ponerse al día de la situación sanitaria y epidemiológica en todo el país para tomar la determinación de prorrogar desde el viernes 21 de mayo el actual Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que impuso restricciones de movilidad y prohibiciones a ciertas actividades para desalentar la circulación y así bajar los contagios de coronavirus.

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Fernández llegó en helicóptero hasta la Casa Rosada cerca de las 11.30 y hasta la caída del sol mantuvo reuniones con el jefe de gabinete, Santiago Cafiero, y diferentes funcionarios de su gabinete y de otras administraciones. Incluso el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, acudió volando hasta Balcarce 50 por la tarde para discutir los pasos a seguir, dada la imposibilidad de aprobar y promulgar en trámite exprés la ley que facultaría al Poder Ejecutivo a tomar medidas sin necesidad de consensuar previamente con los gobernadores y el jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.

Pese a estar en Europa, Fernández no se desentendió de los números que a diario publicaba el ministerio de Salud. De su paso por Lisboa, Madrid, París y Roma, el presidente se llevó la impresión de estar yendo por el camino correcto, luego de comprobar los cierres incluso más duros que se aplicaron en estas ciudades, y que recién comenzaron a relajarse hace diez días con la llegada de temperaturas más altas, de primavera, la baja de casos diarios, la liberación de camas de terapia intensiva, el avance de la vacunación, y la necesidad de disponer las condiciones para atraer turistas en la inminencia de la temporada alta.

Fernández oyó con atención el pedido de la provincia de Buenos Aires, donde se habla incluso de ir hacia medidas más intensas para disminuir la circulación y, mediante esta estrategia, desacelerar la curva de contagios. Salud bonaerense proyectaba este lunes una semana de trabajo para poner en marcha medidas similares a las que facultaría el proyecto de ley con facultades especiales para el Ejecutivo nacional, cuyo desenlace es todavía incierto ante la imposibilidad del oficialismo de lograr la mayoría en la Cámara de Diputados, a la espera de un mayor consenso para "cerrar todo".

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La gobernación bonaerense le transmitió a Fernández disposición para ir más allá, aunque muy paulatinamente el sistema sanitario se vaya descomprimiendo. Esa es la idea que predomina también en la Casa Rosada, que desde la escalada de conflictividad con el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, se ha decidido a jugar por el bando de Axel Kicillof. De hecho, el viceministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, habló de ir hacia un "cierre fuerte" por tres semanas para planchar definitivamente la positividad reportada a diario por cada jurisdicción.

Pese al fallo de la Corte Suprema que semanas atrás le permitió desoír el DNU vigente, en el gabinete del porteño Horacio Rodríguez Larreta abrieron este lunes paraguas y avisaron que podrían frenar las clases presenciales si los casos no ceden en las próximas 72 horas

En Santa Fe, también el gobernador Omar Perotti pidió extremar la precaución y anunció que evalúa "quitar circulación" para ayudar al sistema de salud, ya colapsado en la capital, Rosario y Rafaela.

Mientras tanto, la Rosada busca acelerar el debate de la ley que entró por el Senado y facultaría a Fernández a adoptar medidas según la calificación de cada conglomerados urbano como zona de bajo, medio y alto riesgo epidemiológico, o bien como zona de "Alarma Epidemiológica y Sanitaria", según el cociente de casos cada 100.000 habitantes, y el porcentaje de camas de terapia ocupadas.

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