“Le ganamos a la mentira instalada por mucho tiempo. Le ganamos a los corruptos”, dijo Facundo Prades, quien encabezó una caravana de cientos de automóviles por el microcentro, cerca de la medianoche.

 

Dos horas antes, los militantes del Frente Unión para Vivir Mejor habían instalado un escenario sobre un semirremolque, con los colores identitarios del sector: Verde y Azul.

 

Mientras, por las radios y canales de TV se escuchaban los otros triunfos opositores, tanto a nivel provincial y nacional. Un cambio rotundo en la vida política de la Argentina y hasta de la ciudad del Gorosito que le fue reacia al frente gobernante.

Ni al gobernador Daniel Peralta, ni a la ministra Alicia Kirchner le alcanzaron las últimas semanas de mega-anuncios para ganarle al “voto bronca”, o, como dicen los ahora triunfantes: el “voto cambio”.

 

“Con el pueblo no se juega. Han jugado mucho tiempo con nosotros”, expresó Prades, ante una euforia total de vecinos de distintos signos políticos que –hasta ayer- estaban en la vereda de enfrente y que a partir del 10 de diciembre serán los oficialistas.

 

“Llegó la hora de los comunes, de los sencillos, de los humildes”, exclamó. “La hora de los que queremos levantar a Caleta”.

“Vamos a convocar a todos los espacios para trabajar por Caleta. Caleta se tiene que poner de pie”, añadió.

“No hablemos más del pasado. Del pasado que es oscuro y es corrupción. A partir de ahora empezaremos a hablar del presente y del futuro en Caleta Olivia. El pueblo tiene que recuperar la esperanza”, expresó.

“Con tranquilidad, cada uno desde su espacio, vamos a convocar a los mejores hombres y mujeres para levantar a Caleta, sin distinción de partidos políticos. Caleta necesita gente que la quiera, como cada uno de nosotros”, exhortó.