La multinacional PepsiCo ha anunciado que su centro embotellador de Fresno, California, prevé ahorrar cerca de un millón de dólares anuales en combustible gracias a la expansión de su flota de camiones eléctricos y a la mejora en su capacidad de carga eléctrica, según un portavoz de la empresa.
El complejo, que ocupa una superficie de 15.800 metros cuadrados, ya cuenta con infraestructura para cargar 50 camiones eléctricos, tras la reciente incorporación de más megavatios a través del programa Flex Connect en colaboración con la empresa energética PG&E. Esta mejora ha permitido ampliar la capacidad de carga, que anteriormente solo alcanzaba a 30 vehículos, hasta cubrir toda la flota disponible en el centro.
Según Anton Antunovic, responsable de logística eléctrica de PepsiCo, el rendimiento operativo no se ha visto comprometido, incluso cuando la instalación funcionaba con una capacidad eléctrica inferior, de 4,5 megavatios frente a los 6 actuales. “Hemos podido operar de forma prácticamente idéntica, incluso con menor potencia”, señaló.
Una de las claves del éxito ha sido la velocidad de carga. Los camiones eléctricos de la compañía pueden alcanzar el 80 % de su carga en un tiempo estimado de entre 40 y 60 minutos, lo que permite mantener la operativa logística sin interrupciones significativas.
El centro de Fresno distribuye productos como Pepsi, Starry, Rockstar y el agua embotellada Aquafina en toda la región, consolidándose como un nodo estratégico en la red de distribución del grupo.
La expansión energética ha sido posible gracias a la capacidad del sistema Flex Connect para redistribuir el consumo eléctrico durante distintos días y franjas horarias, mitigando así los efectos de la alta demanda estacional en la red, especialmente durante los meses de verano.
Este avance forma parte de una estrategia de sostenibilidad más amplia de PepsiCo, que ya cuenta con otros centros logísticos electrificados en California. En la planta de Frito-Lay en Modesto, por ejemplo, operan actualmente 15 camiones eléctricos. Además, PepsiCo Beverages North America gestiona 21 unidades del modelo Tesla Semi en Sacramento y otras 24 en Torrance.
En total, las divisiones Frito-Lay y Pepsi —ambas integradas en PepsiCo— ya disponen de una flota de 1.500 vehículos eléctricos de distintos tamaños y configuraciones, lo que refuerza el compromiso del grupo con la descarbonización del transporte y la innovación sostenible en la cadena de suministro.
Con nuevas localizaciones ya planificadas para integrarse en el programa Flex Connect, PepsiCo avanza con paso firme hacia su meta de neutralidad en carbono y eficiencia energética en el transporte de mercancías en Estados Unidos.
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