Negocia para habilitar el tratamiento sobre tablas, para lo que son necesarios dos tercios. Qué piden el PRO y la UCR. Diferencias con el régimen de Milei.
Por Juan Rubinacci
El Régimen Provincial de Inversiones Estratégicas (conocido como RIGI bonaerense) enviado por el gobierno de Axel Kicillof a la Legislatura bonaerense podría ser aprobado este miércoles en la sesión de Diputados si la oposición le habilita el tratamiento sobre tablas, cosa que se negociará hasta última hora.
Unión por la Patria (UP) necesita sentar 47 diputados en el recinto para lograr cuórum y, después, conseguir el apoyo de dos tercios de los presentes para habilitar el tratamiento del proyecto. Si logra poner en marcha la discusión, luego el oficialismo necesitará mayoría simple para aprobar la iniciativa.
Durante la reunión de prelabor parlamentaria de este martes, los bloques trabajaron en las modificaciones planteadas por la oposición y condicionaron el tratamiento sobre tablas a que el Ejecutivo de Buenos Aires haga lugar a esos cambios. Un sector de la oposición le pidió a UP una ampliación de los sectores alcanzados por los beneficios del régimen, como hacerle lugar a la agroindustria, ofrecer mayores concesiones en servicios públicos y ampliar plazos.
El PRO, la UCR y la CC tienen la llave
Sin embargo, los bloques del ex-Juntos por el Cambio parecieran tener la llave para habilitar el tratamiento sobre tablas y evitar que el proyecto pase por comisiones. A última hora del martes ingresó un listado de diez proyectos de declaración, resoluciones y leyes con firma del PRO, la UCR y la Coalición Cívica que serán evaluados hasta el mediodía de este miércoles. Sería la moneda de cambio para que esas bancadas habiliten los dos tercios necesarios para discutir sobre tablas. A esas voluntades podría sumarse la bancada Unión Renovación y Fe, que también planteó modificaciones al texto original.
El bloque Acuerdo cívico- UCR + GEN
Lo que pase en el recinto es otra cosa. Allí es fija que La Libertad Avanza, PRO Libertad, el PRO y la izquierda votarán en contra, aunque esas manos no resulten necesarias para darle vida al régimen de inversiones de Kicillof.
Entre los fundamentos de las bancadas opositoras se encuentra que los beneficios impositivos son menores al RIGI nacional, aprobado en la ley Bases. Cuestionan que hay menores ventajas para los que más aporten y viceversa. Además, resisten las incentivaciones de mayor quita impositiva a las empresas que aseguren políticas de género, la sustitución de importaciones y la sustentabilidad ambiental.
En el PRO señalaron que el programa tiene un mecanismo “discrecional y arbitrario en manos de la autoridad de aplicación” y que el sistema va en desmedro de los mayores inversores. “Es un RIGI de izquierda”, plantean y afirman que “genera dudas para el sector y para el mercado”.
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