Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), en la previa a las elecciones se cortó el ajuste del gasto en prestaciones sociales. Hubo un incremento real de 1,7% y eso llevó a un incremento del rojo primario, que fue de $229.000 millones, muy por encima de septiembre. Coincidió con el récord 2021 de envíos del BCRA al Tesoro.
Por: Mariano Cuparo Ortiz.
Con la llegada del cuarto trimestre, llegó la disparada del déficit primario. El dato califica entre las explicaciones del acortamiento de distancias, por parte del oficialismo, en las elecciones del fin del semana. Y es que por primera vez en el año hubo un aumento interanual del gasto social, que venía ajustando fuerte. Así, en octubre, en la cuenta de la base devengada, el rojo fue de nada menos que $229.512 millones, lo que implicaría, de verificarse un resultado semejante en el base caja que publicará la semana que viene la Secretaría de Hacienda, un salto importante en el déficit. Los números, además, van en paralelo con el récord en emisión monetaria para abastecer al Tesoro de fondos, que se registró también durante el mes pasado.
Lo que disparó al rojo primario durante octubre fueron dos cuentas que ya venían creciendo en los meses previos y una nueva que se sumó. Por un lado, los subsidios energéticos, que registraron un fuerte salto en lo que va del año; por otro, la obra pública, que creció con fuerza durante este año, recomponiendo lo perdido en el 2019 de ajuste a la sombra del FMI y del 2020 pandémico; y, por último, el gasto social, impacto que se sumó a último momento, en pleno contexto electoral, y de la mano de la suba en asignaciones familiares.
Los datos fueron publicados por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) a través del informe de Análisis de la ejecución presupuestaria nacional, correspondiente a octubre. El número corresponde al dato devengado, es decir a los asientos contables que muestran los diferentes gastos e ingresos. Eso puede diferir del base caja que publica todos los meses la Secretaría de Hacienda, que por ejemplo no muestra lo ocurrido con los pagos que se patean hacia adelante. Ese número, el oficial, será publicado el 23 de noviembre.
Además, desde la consultora Aerarium proyectan un rojo base caja de $175.000 millones. Bastante menor que el devengado de OPC pero aun el peor déficit de todo el año, si se toma en cuenta el impuesto extraordinario a las grandes fortunas. Y el segundo peor, si se lo deja de lado.
Lo que sí permite observar el informe de la OPC es la tendencia y la dinámica hacia adentro. Ahí se observa que por primera vez en el año, y luego de un fuerte ajuste en esa cuenta que generó grandes discusiones hacia adentro del oficialismo, el gasto social creció en términos reales al comparar con el mismo mes del año pasado. Las prestaciones sociales aumentaron 54,6% nominal, lo que implicó un incremento real de 1,7%.
Se trata de un cambio de tinte electoral, que se reflejó en el acortamiento de distancias observado respecto a las PASO. La OPC sintetizó: “En octubre de 2021, las prestaciones sociales ($475.778 millones) se incrementaron 1,7% anual a partir del impulso de las asignaciones familiares (30,6% anual) y los programas sociales (8,9% anual). En el primer caso se explica fundamentalmente por el impacto del Decreto 719/2021, que contempla la duplicación del salario familiar a trabajadores registrados y monotributistas con hijos a cargo y con ingresos familiares de hasta $115.062”.
Y agregó: “Por su parte, las partidas en programas sociales se incrementaron básicamente por el aumento en el valor de las prestaciones y la cantidad de beneficiarios que a lo largo de este año se ha verificado en los programas Inclusión Socio Productiva y Desarrollo Local, Potenciar Trabajo, Políticas Alimentarias, Becas PROGRESAR y REPRO II, entre otros”. En parte, también, la diferencia interanual se explicó porque en octubre del 2020 no hubo mucha ejecución de ATP e IFE.
El otro gasto que trajo mucha polémica interna en el oficialismo fue el de los subsidios energéticos. Hubo un incremento de 4,4% real interanual en los subsidios económicos en general. Pero los que traccionaron fueron los del sistema eléctrico, claramente: el alza fue de 124,5% real. Ahí una fuerte discusión: mientras que esa cuenta, que además de beneficiar a hogares con bajos ingresos también ayuda a los de los deciles más altos, las jubilaciones volvieron a caer 4% real. Ajuste asimétrico.
La obra pública, por su parte, creció nada menos que 78,8% real. La clásica herramienta de reactivación económica será usada también el año que viene, según el Presupuesto 2022, con un aumento real proyectado de 22,6% en esas erogaciones.
Un dato aparte pero totalmente relacionado: en octubre el BCRA batió el récord para el 2021 de envíos al Tesoro, para pagar gasto primario. Entre adelantos transitorios y transferencias de utilidades, totalizó $352.712 millones. Desde mayo del 2020, cuando mandó $430.000 millones, que no se alcanzaba una cifra tan abultada.
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