El nieto de Carlotto quiere explicaciones

El nieto de Carlotto quiere explicaciones

Ignacio Guido fue entrevistado por el diario Popular, de Olavarría. "Hay gente que va a tener que dar muchísimas explicaciones", alertó.

En Olavarría, hay gente que va a tener que dar muchísimas explicaciones." Entrevistado por el diario El Popular, editado en esa ciudad bonaerense, donde se crió, Ignacio Guido Montoya Carlotto señaló que buscará acompañar a sus padres de crianza en el proceso judicial que se abrirá para averiguar cómo ocurrió su apropiación. Aunque dejó en claro que tanto ellos como otros actores deberán explicar cómo él llegó a sus manos. 

A dos semanas de enterarse de su identidad biológica y de saberse nieto de un emblema de los Derechos Humanos, la Abuela Estela de Carlotto, Ignacio Guido volvió a su tierra de crianza y fue crítico de ella. "Olavarría es una ciudad que se ha caracterizado en gran medida por mirar al costado en estas situaciones relacionadas con la dictadura" cívico-militar, señaló el Nieto 114.

Según consignó Tiempo Argentino, el joven se mostró confiado en que su caso "servirá para tener en cuenta que (en Olvarría) han pasado muchas cosas". Y se pronunció a favor de "investigar lo que haya que investigar y que cada uno tendrá que hacerse responsable de lo que haya hecho". Además de a la militar, Ignacio Guido apuntó a la "enorme responsabilidad civil" que sostuvo a la dictadura y fue partícipe del plan sistemático de apropiación de bebés, un accionar que aún mantiene a 400 varones y mujeres con su identidad apropiada, como la tuvo él hasta el 5 de este mes.

 

De vuelta a Olavarría, Ignacio Guido dijo estar reencontrándose con su casa y su música. "Soy el mismo que fui cuando salí de acá, pero ahora tengo una familia más grande.

 

En ese sentido, Ignacio Guido hizo hincapié en los "medios que en su momento no informaron ni investigaron nada, sólo dijeron cualquier basura. Y cuando sucedió esta noticia (NdR: su restitución) empezaron a tratar de investigar un montón de cosas y me parece bárbaro. Pero si hubieran sido tan incisivos 35 años atrás, hubiera sido diferente. Lo que están buscando, en todo caso, es la primicia y no la noticia que se construye a partir de investigar."

Consultado por El Popular, el joven dijo que Carlos Aguilar, el estanciero –ya fallecido– que está sospechado de haber sido quien lo entregó a sus padres de crianza, "venía poco al campo" donde él residía. "Desde que falleció su hija Mercedes dejó de ir durante muchísimo tiempo y yo me fui también muy rápido del campo. La relación que tuve no era ni mala ni buena, no era nada."

"Fui y de hecho soy el músico que era mi papá y que era mi abuelo paterno, y soy hasta el orador que era mi mamá", señaló Ignacio Guido.. Una condición que, según afirmó, le permite sentir que la dictadura "no se apropiaron de nada". Lejos de ello, sostuvo que él y sus familias biológicas, los Carlotto y los Montoya, "le ganamos hasta a la propia muerte. Porque mi abuela paterna (NdR: Hortencia Ardura), cuando me ve, me dice 'sos mi hijo. Te veo y veo a mi hijo por el parecido físico que tienen'. Y yo le dije: '¿viste cómo los cagamos?'"

De vuelta a Olavarría, Ignacio Guido dijo estar reencontrándose con su casa y su música. "Soy el mismo que fui cuando salí de acá, pero ahora tengo una familia más grande. Cerré algunas cosas que estaban haciendo ruidos ahí en el subconsciente."

La mirada de la entrevistadora

Silvana Melo, periodista de El Popular, fue la primera en entrevistar al nieto de Estela de Carlotto. "Tenemos un vínculo basado en lo artístico: a él le gustó un libro que escribí y a mí me encanta la música que él hace", cuenta. "Es un tipo muy cálido y con mucho talento en lo que hace. A partir de ahí uno se puede vincular de una manera profunda." Para Melo, a partir de la restitución de Ignacio Guido, "lo que sucede en Olavarría es una tremenda conmoción. (...) Hay una solicitada a favor de un represor en el '84 con todos los nombres de Olavarría fundante. Carlos Aguilar formaba parte de esos nombres y que salte de esta manera es como que te den un golpe en la médula. Los que pueden sienten la alegría y los demás están paralizados."

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