Desde el Gobierno de Guillermo Montenegro aseguraron que "comprenden" la decisión de algunos sectores como la gastronomía y la venta de indumentaria de reabrir sus puertas a pesar de no contar con los permisos correspondientes y descartaron que busquen aplicar sanciones para cercenar el derecho a huelga.

"Escuchar a los sectores significa también entender su protesta y por eso consideramos que es necesario que toda la política marplatense se ponga al frente de esta discusión para conceder más habilitaciones por la situación laboral que estamos viviendo", sostuvo el coordinador del gabinete municipal, Alejandro Rabinovich.

El funcionario consideró que este tipo de manifestaciones no responden a una "protesta de los sectores contra la política" sino a una necesidad económica. "Ellos necesitan trabajo ya y nosotros entendemos lo mismo y sabemos lo difícil que es", garantizó, y agregó: "Pedimos por favor a la Provincia y la Nación que Mar del Plata tenga una fase especial que sea acorde a la lógica de la ciudad".

En declaraciones a 0223 Radio, el referente del Gobierno local aclaró que "se están haciendo los controles correspondientes" a través de Inspección General y la Policía bonaerense en las calles para verificar el cumplimiento de los protocolos sanitarios y evitar irregularidades en los funcionamientos al tiempo que descartó que se busque aplicar una política de sanciones que vaya en contra del derecho de protesta.

"Una acción como la llamada 'huelga a la japonesa" tiene que ver con el derecho de protesta y creemos que cualquier persona tiene derecho a protestar. Siempre hemos dicho que somos cautelosos sobre cómo se sancionan este tipo de cuestiones", aclaró.

Desde este martes, y garantizando el cumplimiento a los protocolos de trabajo que se confeccionaron durante la pandemia del Covid-19, los comercios de venta de indumentaria decidieron permitir el ingreso de sus clientes - hasta entonces solo estaban autorizados a atender con el mostrador a la calle - hasta tanto sesión el Concejo Deliberante y se brinde una respuesta concreta al sector.

Gimnasios, natatorios y estudios de danza, en tanto, también decidieron en algunos casos reabrir sus puertas desde este miércoles, entendiendo que en los últimos siete meses solamente recuperaron una actividad parcial durante dos semanas.

La construcción y la gastronomía fueron los rubros pioneros en estas medidas: en el primer caso, se decidió continuar con la actividad en las obras privadas mientras que, en el segundo, hubo muchos casos en los que los comerciantes sacaron las mesas a la calle para tratar de recuperar algún tipo de ingreso y subsistir frente al complejo contexto de crisis.

En las últimas horas, distintos bares, restaurantes y cafés de Mar del Plata comunicaron a los clientes a través de sus redes sociales que volverían a trabajar en forma plena desde el 1 de octubre.