El intendente encabezó el acto oficial por el Día de la Bandera. La insignia celeste y blanca, dijo, "es lo que nos une". Envió también un sentido mensaje a todos los papás: "Es el primer Día del Padre sin mi viejo. Él me enseñó todo. A los que lo tienen, abrácenlo fuerte hoy".
El intendente Guillermo Montenegro manifestó hoy que la Argentina “no puede permitirse tener diferencias cuando se trata de empujar para que todos estemos mejor” al encabezar el acto oficial por el Día de la Bandera en Playa Grande, oportunidad en la que además recordó a su papá, quien falleció hace cuatro meses, saludó a todos los padres de Mar del Plata y Batán en su día e invitó a los hijos “abrazarlos muy fuerte este domingo”.
Tras la entonación del Himno Nacional Argentino y la bendición a cargo del obispo Gabriel Mestre, el jefe comunal brindó un breve discurso junto a la bandera en la rotonda del Golf, acompañado por parte de su gabinete, ex combatientes de Malvinas y tres de sus hijos que los acompañaron en el Día del Padre.
La bandera celeste y blanca, dijo, “es lo que nos une” y “ese símbolo de unidad es muy importante en este momento”. Enseguida, hizo alusión a la pandemia: “Este año y medio ha sido muy duro para todos, pero para mí fue más duro para los marplatenses porque yo vivo en esta ciudad y sufro por esta ciudad. Sentí un gran acompañamiento de toda la sociedad en todo este tiempo. Y el esfuerzo que cada uno tuvo que hacer es realmente digno de admirar y agradecer”.
“No puedo dejar de mencionar a lo que no están, los que se fueron en este último tiempo por la pandemia. Todos nosotros tenemos a alguien cercano que no está, que no pudimos despedir como queríamos y nos queda ese sabor amargo de no haber compartido más cosas. Y agradecer a los que siguen peleando todos los días dentro de los distintos sistemas, en la salud, en las fuerzas armadas, los que están en la calle poniéndole el pecho a esta situación que nos toca vivir”, sostuvo el intendente.
Seguido, el jefe comunal destacó que la ciudad “ha logrado estar en la situación que estamos por el esfuerzo de todos” y “no el de un gobierno, que es circunstancial”, sino por “el empuje de los marplatenses”.
Montenegro aprovechó este marco para volver a referirse a la presencialidad escolar. “A los más chicos, que este año y medio hicieron un esfuerzo tremendo para poder mantener las clases por Zoom, para los padres, para la comunidad educativa, les digo que nosotros vamos a seguir haciendo todo porque entendemos que es importante que vuelvan a las clases presenciales, para seguir juntos, unidos, empujando”.
Tras ello, sin hacer alusión directa a la tensión con el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires por la presencialidad escolar, dijo: “No nos podemos permitir tener diferencias cuando se trata de empujar para que todos estemos mejor”.
“Mi viejo me enseñó todo”
El padre del intendente de General Pueyrredon, Guillermo Montenegro, falleció el pasado 15 de febrero a los 86 años en la ciudad de Buenos Aires. Se había desempeñado como submarinista y fue capitán de la embarcación ARA Salta.
“Es el primer Día del Padre sin mi viejo. No siempre estaba, porque a veces estaba viajando pero ahora uno le da la importancia y tendría que haber dicho ´’no importa la circunstancia’, tendría que haber estado igual. Lo digo para los que todavía tienen el viejo, para que hagan ese esfuerzo adicional que siento yo que tendría que haber hecho para estar siempre con él”, expresó conmovido el intendente.
Seguido, agregó: “Tuve mucho tiempo y aprendí mucho de mi viejo. Y le agradezco. Mi viejo me enseñó todo. Acá nomás, en la Base Naval. Me enseñaron los valores, el respeto, la honestidad, la amistad, la lealtad, todas cosas que uno trata de llevar en la vida. Y creo que el día del padre es agradecerle todo lo que empujaron para que seamos”.
Además, remarcó que “la felicidad en nuestros hijos es nuestra felicidad” y reconoció: “Mi mayor temor es que mis hijos no sean felices”.
“En eso le agradezco a todos los padres de nuestro país y especialmente de nuestra ciudad para que sigan empujando por la felicidad de nuestros hijos. Yo sé que a mi viejo lo sigo abrazando todos los días, porque lo tengo permanentemente. Abrácenlo fuerte hoy, disfruten el Día del Padre como se merece cada uno”, afirmó.
Por último, Guillermo Montenegro compartió su deseo de que la pandemia “en breve ya termine” y “podamos abrazarnos, besarnos, disfrutar, festejar el día del padre como todos lo entendemos”.
Saludó a los padres en su día y destacó la necesidad de celebrar el Día de la Bandera “unidos bajo un mismo sueño, que todos los argentinos vivamos mejor”.
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