Merkel busca una UE más integrada

Merkel busca una UE más integrada
Su gobierno presentó una propuesta para llegar a un nuevo tratado, que dé más facultades a Bruselas
Alemania, principal contribuyente de los fondos de rescate europeo, está decidida a imponer sus estrictas reglas a los países afectados por la crisis, y para eso impulsará la firma de un nuevo tratado comunitario, afirma el semanario Der Spiegel en su edición de hoy.

Decidida a responder a la crisis con una mayor unidad continental, la canciller Angela Merkel baraja, entre otras cosas, la idea de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) "pueda adquirir el derecho de vigilar los presupuestos de los 27 Estados miembros y castigar a los que generen déficit", señala el semanario.

El asesor de Política Europea de Merkel, Nikolaus Mayer-Landrut, ya habría comunicado la propuesta de la canciller de abordar esta cuestión en la cumbre que tendrá lugar en Bruselas en diciembre próximo.

Pero, según el periódico, "la propuesta no provoca mucho entusiasmo entre la mayoría de los países miembros".

"Durante un encuentro informal de diez ministros de Relaciones Exteriores, una mayoría rechazó la idea de tal reunión, adelantada por el ministro alemán, Guido Westerwelle", según la misma fuente.

Hay socios estrechos de Alemania, como Polonia, que son contrarios a la iniciativa por considerar que existen escasas posibilidades de compromiso entre los 27 socios de la UE.

Desde hace ya algunos meses Merkel insiste en la necesidad de responder a la crisis con mayor unidad continental.

"Hay etapas hacia una mayor integración europea que requerirán cambios en el tratado [de la UE]. Todavía no hemos llegado a eso, pero no tiene que haber tabúes", declaró Merkel a fines de mayo durante una cumbre en el mar Báltico.

Alemania, la mayor economía europea, es la que realiza también el principal aporte (27%) para el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, el organismo encargado de preservar la estabilidad continental a través de la ayuda financiera a los países en crisis. Por esta razón, legisladores y contribuyentes alemanes vigilan de cerca las condiciones de cada rescate.

Hasta ahora, Merkel consiguió que el Parlamento de su país apruebe los planes de rescate a Grecia y España con el argumento de que la debacle de cualquiera de los socios comunitarios terminaría afectando también a la "locomotora alemana".

De hecho, la popularidad de la canciller está en aumento por el modo en que ha conducido hasta ahora la crisis.

Un 57% de los alemanes considera que "se puede tener confianza" en la canciller, según un sondeo difundido ayer por el canal de televisión ARD.

"A pesar de la crisis y de la crítica, la canciller Merkel goza de un crédito elevado entre los alemanes", indicó el canal de televisión al dar cuenta del sondeo realizado por el instituto Infratest.

Esta semana, Berlín lanzó una fuerte campaña en los medios con el eslogan "Yo quiero a Europa". Estos avisos incluyen a empresarios, políticos y deportistas y concluyen con la frase: "Ellos saben por qué Europa es buena para nosotros".

Una serie de datos económicos sombríos muestran que Alemania necesita el recordatorio. Algunos índices de la producción y del sector de servicios mostraron que la economía local se contrajo en agosto por cuarto mes consecutivo.

Las órdenes de compra extranjeras se hundieron al ritmo más rápido de los últimos tres años, y los economistas advirtieron una vez más que la zona euro se encamina a una recesión técnica.

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