El Concejo Deliberante dividido en siete bloques deja claro que el cuerpo legislativo de la ciudad es un terreno donde nadie manda. Salvo el radicalismo, todas las bancadas sufrieron bajas, siendo la del Frente Cívico la que más escisiones tuvo.
Mientras, el Frente Cívico iba enviando claros mensajes al intendente, Daniel Giacomino, diciéndole que no tenía la mayoría garantizada: para aprobar los proyectos del Ejecutivo, era necesario un debate intenso.
El enfrentamiento entre Giacomino y el ex intendente Luis Juez fue profundizando las diferencias con el bloque mayoritario. Finalmente, tres ediles cercanos al intendente formaron la única bancada oficialista.
Ahora quedó claro que Juez tampoco tenía autoridad total sobre el bloque de su partido. La imposición de Walter Nostrala provocó el alejamiento de las cinco edilas y un distanciamiento casi definitivo con el viceintendente, Carlos Vicente.
Ya no quedan figuras políticas con peso desequilibrante en el Concejo. Para aprobar un proyecto, será necesario el consenso de al menos tres bloques.
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