Entre otros detalles salientes, el informe de la UCA indica que alrededor del 25 por ciento de los pacientes aseguró que debió esperar más de dos meses para recibir atención médica, mientras que el 45 afirmó haber aguardado un mes. “Esta situación contribuye a reproducir institucionalmente la desigualdad social existente”, sostuvieron.

A su vez, se descartó el viejo mito que intentaba instalar que los ciudadanos se trasladaban a las clínicas de la Capital Federal y, por el contrario, se demostró que ese argumento no es verídico: tan solo el 14 por ciento de los bonaerenses se transportan a los hospitales porteños para ser atendidos.

Actualmente la salud pública en el territorio de la provincia está atravesando un momento de crisis profunda en la que, con varios conflictos en cuanto a la cobertura en las prácticas y el pago a los profesionales que atienden por IOMA, se le suma la problemática en relación a la infraestructura hospitalaria, el déficit de cargos y los bajos sueldos a los médicos.

"Sólo un 35,9 por ciento de la población del Gran Buenos Aires cuenta con obra social, un 13 es beneficiario de PAMI y un 9,7 costea una prepaga o plan privado. La diferencia entre la provincia y la Ciudad es significativa ya que en ésta sólo el 12,4 por ciento de la población no tiene cobertura. Cerca de 28 puntos porcentuales los separan”, destacaron desde la Universidad Católica.

Los números expuestos por la investigación de la UCA son alarmantes y desde el gobierno de María Eugenia Vidal, junto al ministro de Salud, Andrés Scarsi, deberían analizar, no solamente los resultados del informe, sino también las posibles medidas para resolver una temática que pareciera estar lejos de solucionarse.

Una de cada tres personas no tiene obra social y crecen las quejas por la atención en hospitales - https://t.co/8VoVyukM7i

La @defensoriaPBA elaboró junto al @ODSAUCA un informe sobre estos aspectos del sistema sanitario.

— ODSA - UCA (@ODSAUCA) 8 de abril de 2018