Más de 500 millones de pesos es el Presupuesto de este año para solventar la tarea legislativa, a cargo del vicegobernador Pedro Pesatti. Es decir que, para el ejercicio en curso, cada diputado le costará al Estado rionegrino 11 millones de pesos anuales. Cuál es el destino que se le da a la millonaria suma a razón de una sesión por mes, la falta de controles y la caja política.

En la primera gestión de Alberto Weretilneck al frente de la Gobernación, la transferencia de dinero para la actividad del Poder Legislativo estuvo empañada por varios escándalos. En el primer tramo de Gobierno, donde la conducción del Parlamento estuvo a cargo del extinto vicegobernador Carlos Peralta, las erogaciones en la Casa de las Leyes se vieron envueltas por remuneraciones salariales que, en promedio, rondaban los $ 30 mil y, en algunos casos, llegaban a los 50 mil. No sólo para autoridades y legisladores, sino también para los empleados de planta política -asesores- y permanentes -honorarios del poder-. 

Pero eso no es todo, tras su desaparición física, el bochorno se desató en torno a los denominados “gastos reservados”, dinero que los bloques recibían para viviendas, movilización, alimentos, y demás. El punto es que los legisladores absorbían millonarias sumas de dinero sin la obligación de dar explicaciones sobre su destino. De hecho, en un acto de sincericidio, una legisladora blanqueó que gran parte se empleaba para mantener la estructura partidaria, y profundizó la polémica. 

El uso indiscriminado de dichos fondos terminó en un juicio de cuentas, por par-te de los órganos de control, en el que se vieron involucrados varios exdiputados. La causa aún no tuvo resolución. Una presunta “negociación política” la habría demorado y, como parte de ella, se procedió eliminando el beneficio. 

Para este año, el vicegobernador Pesatti recibió $ 500 millones para sostener el funcionamiento legislativo. Es decir que, el costo diario para mantener una estructura de mil empleados, entre autoridades y cargos en planta permanente y temporales, es de un millón y medio de pesos. El 84 % se va en sueldos. Respecto al año anterior, los ingresos del Parlamento se incrementaron en un 34 %.

El presupuesto está asignado a salarios, insumos y servicios, entre otras cosas, abocados a la actividad de la Cámara. Pero también incluye partidas para el funcionamiento de los bloques que cuentan con asesores y empleados administrativos. Algo similar ocurre en el caso particular de cada diputado, que también cuenta con un equipo propio.

Ahora bien, cuál es la cifra con la que cuentan los legisladores en forma mensual. De acuerdo a lo que pudo averiguar La Tecla Patagonia, el sueldo básico promedio, es de $ 22.618,31. A su vez, dicho monto se incrementa con el cobro en concepto de años de antigüedad del 2 % hasta los 5 años; del 2,25 % entre 6 y 10 años; 2,5 % entre 10 y 15; 2,7 % entre 15 y 20, y luego de los 20 años es del 3 % anual. Además, en el caso de quienes poseen un título profesional, también reciben un plus a parte.

Pero esto no es todo lo que se engloba en los haberes que perciben a fin de mes. Luego del escándalo que se armó con los “gastos reservados”, las autoridades legislativas decidieron modificar este procedimiento por el que recibían alrededor de $ 16 mil en negro y donde su rendición no era obligatoria. 

A cambio, ahora se cobra un “adicional funcional” de $ 24.765, que sí figura en el recibo de sueldo de cada legislador. En teoría, en concepto de gastos de funcionamiento, como artículos de librería, y demás. La cuestión es hasta qué punto su destino es éste ya que, de acuerdo a lo que le contaron a este medio en estricto off de record, la Legislatura es la que se encarga de hacer este tipo de compras. Hasta aquí, la cifra que se registra en el recibo de un parlamentario es de casi $ 50 mil, promedio.

Asimismo, cada uno recibe módulos con alrededor de 150 puntos, que son utilizados sólo para contratar asesores. Cada cargo definido en puntos es de no más de 50, esto para el caso de una designación A categoría 4, que es un profesional. Ahora, si la persona tiene mucha antigüedad, su sueldo es mayor. Justamente, una práctica común es la contratación de gente con años de trabajo en el Estado, ya que “reparten” y usan este dinero para sumar empleados.

La distribución de los puntos corre por cuenta del vicegobernador Pesatti. Con esto “tiene una caja política importantísima”, contaron a este medio fuentes que prefirieron preservar su identidad. Y si bien cada bloque recibe una cierta cantidad, hay quienes “se lo solicitan directamente al conductor de la Legislatura” porque se trata, lisa y llanamente, de una “negociación política”. 

POLEMICA: Los famosos “gastos reservados” que terminaron bajo la lupa

Hace dos años atrás, el Tribunal de Cuentas de la Provincia inició un Juicio de Cuentas contra 15 legisladores, justamente, por la falta de rendiciones en los “gastos reservados”. 

El episodio ocasionó cierto revuelo. El órgano de control inició el proceso con el fin de que se aclare qué fue lo que sucedió con dichos fondos, ya que entre el año 2011 y mediados de 2014, se estima que las erogaciones realizadas por la Legislatura en este concepto habrían sido de cerca de 30 millones de pesos. 

Entre septiembre, octubre y noviembre de 2011, se habrían destinado más de 3 millones; en 2012 la suma se acercaba a los 9 millones; en 2013 alrededor de 11 millones y, durante el primer trimestre de 2014 –última vez que se distribuyeron fondos bajo este concepto-, de unos 3 millones en total. 

A la fecha, todavía no se llegó a una resolución sobre la polémica causa. Como el caso tuvo su trasfondo político, hay quienes no descartan que en el desenlace “virtual” haya primado esta cuestión. Es que entre los involucrados se encontraba el entonces vicegobernador radical Bautista Mendioroz y su sucesor, el hoy gobernador Alberto Weretilneck, por el período de 20 días que ocupó el cargo. 

El tema es que de no resultar suficiente la justificación sobre qué se realizó con esos recursos, está previsto el recupero de los fondos. De esta forma, los involucrados tendrán que devolver cifras que van entre los 50 mil y el millón de pesos.

GASTOS VARIAS: En qué se fueron varios billetes del presupuesto legislativo

Entre las erogaciones que se realizaron en este primer semestre, una de las que más llama la atención es la adquisición de dos vehículos 0 KM destinados a Presidencia y Secretaría Administrativa. Lo llamativo del caso es que la operación se realizó a través de una compra directa por un valor cercano a los 900 mil pesos. El punto es que previamente se había realizado el llamado a licitación pública correspondiente, pero al fracasar en dos oportunidades, la Administración de la Legislatu-ra solicitó una autorización al vicegobernador Pesatti para hacer la operación en forma directa. 

Así, se adquirió un Peugeot 308 Feline 1.6 por $ 457.400 y un Toyota Corolla XEI 1.8 CVT de $ 420.400.

A su vez, también se compraron con destino a la Secretaría de Presidencia tres celulares que le costaron a las arcas del Poder Legislativo un poco más de 50 mil pesos. Por los móviles adquiridos marca Samsung S6, se abonó una suma de $16.799, mientras que en el mercado el mismo producto ronda los 12 mil pesos. Además, en el concurso de precios dos ofertas menores fueron desechadas, una porque el oferente no estaba inscripto como proveedor del Estado y en la otra no había especificaciones al respecto.

SOBRESUELDOS VS GASTOS RESERVADOS: Causas que tienen muchas similitudes pero distintos finales

En el último tramo de la gestión de Miguel Saiz al frente del Ejecutivo rionegrino, su Gabinete terminó con una denuncia penal por el cobro de sobresueldos. Montos que duplicaban y triplicaban el haber que figuraba en el recibo de sueldo. Este año, la Justicia elevó la causa por peculado a juicio oral. 

Ahora, ¿qué pasa con el Juicio de Cuentas que el Tribunal de Cuentas inició a autoridades legislativas y a los presidentes de cada bloque en 2014 al no aprobar la rendición de “gastos reservados” durante la gestión de 2011? Hasta el momento, quedó “archivado”. 

Las erogaciones indiscriminadas se cortaron, y bajo el concepto de “adicional por funcionamiento”, los legisladores actuales reciben 24 mil pesos más que ahora sí figuran en el recibo de sueldo. El punto es que la causa de sobresueldos en el Ejecutivo es similar a la de “gastos reservados” en el parlamento provincial.

REMUNERACIONES 2012: Los altos salarios que armaron un flor de escándalo

En el marco de un fuerte ajuste que se llevó a cabo por la compleja situación económico - financiera que atravesaba la provincia, en el año 2012 salieron a la luz los sueldos que por entonces se estaban percibiendo en la Legislatura. El hecho inició una fuerte polémica. Es que en el listado que se hizo público, el promedio salarial rondaba los 30 mil pesos y el piso para el bruto se acercaba los 20 mil. 

Además, por entonces se abonaron más de 40 haberes que alcanzaban los 50 mil pesos. Entre ellos, se encontraba el extinto vicegobernador Carlos Peralta, quien cobrara por mes 48.500 pesos, y sin contar los “gastos reservados” por viviendas, traslados y alimentos. 

Cabe destacar que la nómina no sólo incluía autoridades parlamentarias y legisladores, sino que también aparecían asesores y empleados. En el caso de la planta política, las remuneraciones ascendían a los 20 mil pesos.

UNA CADA 30 DIAS: Magra actividad legislativa por la millonaria suma de 500 millones

En el año 2014, cuando el vicegobernador Pedro Pesatti se hizo cargo de la conducción de la Casa de las Leyes, hubo un pobre ejercicio legislativo. 

Esto, para la millonaria suma de dinero que el Estado provincial eroga en concepto de funcionamiento del parlamento. 

La crisis política en el oficialismo, entre el gobernador Alberto Weretilneck y el senador Miguel Pichetto, fue una de las causales. Lo cierto es que en el primer semestre de dicho año sólo sesionaron cinco veces en forma ordinaria. Desde mayo, que fue la última vez que hubo debate en el recinto, hasta fines de agosto, que se retomó la tarea para la asunción de Pesatti como presidente de la Legislatura, no hubo actividad. 

La segunda parte del año fue más precaria, al punto que sectores de la oposición se quejaron porque el oficialismo tenía paralizada la Cámara. 

La cuestión es que en diciembre de dicho año, entre gallos y media noche, el Ejecutivo convocó a sesión extraordinaria para tratar el Presupuesto 2015 y la polémica renegociación del contrato con Petrobras. 

La cosa no cambió mucho en el 2016. En estos primeros meses, los diputados pasaron por el recinto en cinco oportunidades, incluida la de apertura. Es decir, una vez al mes.