Se acerca el momento cúlmime del Cruce de los Andes y este jueves, antes de arrancar con el tramo final, los 130 expedicionarios aprovecharon la calurosa jornada para tomar sol, refrescarse en el río, comer un rico asado y jugar al truco.

Juan Carlos Gorraga, uno de los gendarmes que acompañan a los participantes de la travesia, fue el encargado de hacer el asado. Cerca de las 11 arrancó con el fuego, mientras el resto escuchaba atento a otro de sus compañeros al momento de dar una charla histórica sobre el cruce que hizo San Martín en el año 1817.

A las 13 ya estaban todos disfrutando de un rico almuerzo. Después vino el postre: el tradicional dulce de membrillo y queso. En la sobremesa hubo truco; funcionarios, periodistas y gendarmes se sumaron a la partida.

Los arrieros aprovecharon la jornada de descanso para revisar los herrajes de las mulas y caballos. Anticipando lo que será este viernes el último tramo emulando la cruzada libertadora.

Por la noche, cenaron un potente guiso, ideal para sumar las calorías necesarias para continuar con la travesía. El viernes por la mañana, tras el desayuno, partirán hacia Valle Hermoso en el límite con el país vecino. Ahí se realizará el acto que conmemora la Batalla de Chacabuco. Antes, el gobernador Sergio Uñac y el ministro del Interior Rogelio Frigerio, quien se sumó al campamento a eso de las 3 de la tarde; participarán de los anuncios que hará el presidente Mauricio Macri en Barreal.