El ministro de Hacienda de la provincia, Cristian Ocampo, resaltó que el cambio de la fuente de financiamiento para el componente externo del Segundo Acueducto del Interior no implica para el Chaco incrementar la deuda tomada sino “sustituir a quien presta”, es decir, al Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil (BNDES) por el Fondo Fiduciario de Infraestructura Regional. “Sería más sencilla la operatoria porque se trabajaría con valores en pesos”, destacó.

El titular de la cartera económica chaqueña planteó así que no se trata de nueva deuda, por tanto la aprobación no requiere la mayoría en Diputados. “En el entendimiento de que es importante, no debiera haber mayores inconvenientes”, confió ayer por la mañana, antes de la sesión en la Legislatura provincial.

Acerca del cambio de fuente de financiamiento, recordó que el martes el gobierno aportó a Diputados la garantía de resguardo para no afectar la relación con el Banco de Brasil. “Se envió un dictamen de la Fiscalía de Estado, acompañado con un dictamen de la Asesoría General de Gobierno, que establecen que la sustitución no afecta tal relación”, comentó en declaraciones a radio Universidad.

En otro punto, recordó que el primer acuerdo logrado por el gobierno chaqueño fue la redeterminación de los valores de un saldo pendiente de transferir que mantenía el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa). Eran 900 millones de pesos a valores históricos los que restaban transferir. “Por eso se suscribió una adenda con el organismo, llevando los valores actualizados a 1560 millones”, precisó Ocampo.

“La erogación efectiva de esos fondos quedó sujeta al financiamiento de la contraparte provincial, que era a través del Banco del Brasil, y es lo que se está demorando. Por eso nuestra iniciativa de buscar otra fuente de financiamiento, que hoy está a través del Fondo Fiduciario de Infraestructura Regional, que es lo que pedimos a los legisladores”, repasó el funcionario.

De ahí que resaltó que no significa incrementar la deuda sino cambiar la fuente de financiación. Será un préstamo de 46 millones de dólares, que era el remanente a ejecutar del crédito brasileño, cuya segunda adenda finalmente no se firmaría dada la demora de la entidad en autorizarla.

Más simple

En ese punto, Ocampo marcó que la operatoria con el banco brasileño “complicaba” la determinación de los certificados de obra por su componente en dólares. De ahí que en el diálogo radial de ayer por la mañana marcó sus expectativas para el tratamiento y aprobación en la sesión de la Legislatura, por la tarde. “No sólo pondría a la obra en condiciones de reactivarse, sino que simplificaría la operatoria de compra de los caños”, subrayó.

Dijo a la vez que el procedimiento con el Fondo Fiduciario se simplificará y que el gobierno ya comenzó “las tratativas”. “Hemos avanzado. Hay un preacuerdo de que sería efectivo el préstamo a la provincia pero se requiere la ley, ya que el repago es con descuento de coparticipación”, indicó.

Si todo avanza según las previsiones oficiales, los obradores se reinstalarían y la obra podría reiniciarse en enero de 2017, con un plazo de ejecución hasta terminarla de 18 meses.

Los caños que faltan

La unión transitoria de empresas encargada de la ejecución del Segundo Acueducto (Rovella Carranza, Supercemento y CPC) sería la que definiría al proveedor de los caños de mayor diámetro que faltan para completar los tramos pendientes, y que no necesariamente sería la empresa brasileña OAS, proveedora hasta el momento de esos materiales, dada la obligatoriedad que impuso el crédito sobre la presencia de una compañía de ese origen.

“Hay libertad de la UTE de comprar a cualquiera de los tres o cuatro proveedores de estos caños que hay en Brasil y Francia. También, gran parte de lo pendiente puede comprarse en Argentina”, sostuvo el ministro y agregó: “Los caños imprescindibles son los de la toma de agua y los del puente, que se producen en esos dos países”.

“Esta posibilidad permite resolver la cuestión, porque los fondos asignados por Enohsa, con la adenda suscripta en Hermoso Campo por el ministro de Interior Rogelio Frigerio, están esperando la otra parte que nos permitirá dar reinicio efectivo de la obra”, resumió Ocampo.