Son la envidia de los grandes conglomerados urbanos del país, especialmente de La Plata y el Conurbano bonaerense. Tienen cero contagios de COVID 19 y emplean barreras sanitarias para impedir el ingreso del virus a sus distritos. Por eso, de a poco, relajan las medidas del aislamiento.

Allí se anotan, entre otros, Balcarce, Castelli, Monte Hermoso y Coronel Suárez, partidos que en las últimas semanas permitieron que sus vecinos salgan a disfrutar del aire libre y a hacer algunas actividades físicas, con restricciones para impedir que se formen multitudes.

El que picó en punta es Monte Hermoso, distrito de apenas 7 mil habitantes ubicado a 105 kilómetros de la populosa Bahía Blanca. El intendente, Alejandro Dichiara, del Frente de Todos, habilitó desde el 11 de mayo las caminatas y el running en las playas del distrito, de las más famosas de la Provincia. También se admitió que los vecinos hagan “esparcimiento”, por mas que vivan a más de 500 metros del mar.

La precaución que se tomó es “geográfica”: quienes viven de la calle Luzuriaga hacia el este pueden salir martes, jueves y sábados, los que viven hacia el oeste de esa arteria pueden salir miércoles, viernes y domingos.

Dichiara le dijo a INFOCIELO que permitió las excepciones luego de comprobar que no habia casos confirmados y tampoco síntomas. “Hicimos dos hisopados, a personal de salud, y dieron negativo”, explicó. También es una ventaja que el distrito tenga un solo acceso, lo que facilita los controles.

Los permisos exceden las actividades recreativas. Monte Hermoso primero habilitó la construcción y los rubros relacionados, con restricciones horarias y terminó de liberar a la segunda semana de aislamiento. Hoy, toda la economía funciona a pleno. “Estamos con todos los comercios trabajando normalmente, con mucho control en el ingreso y egreso”, subrayó el intendente.

Claro que el temor está latente: “Uno va teniendo sus miedos, pero va liberando porque no tenemos casos. La economia solicita que lo hagamos, pero sabemos que ante cualquier caso volvemos al aislamiento automaticamente. Esto es dia a dia”, admitió.

Cerca de allí, en Coronel Suárez, donde residen unas 40 mil personas, el intendente Ricardo Móccero (FDT) habilitó las salidas a correr, a caminar y a andar en bicicleta. Cada actividad tiene su día y para acceder al beneficio hay que tramitarlo en la web municipal. Hay reglas claras y bastante estrictas. Los recorridos están delimitados y hay un protocolo hasta para sobrepasar.

También es obligatorio el uso de mascarilla o tapaboca, no se puede hacer paradas en lugares de tránsito, hay que respetar el distanciamiento social (cinco metros cuanto menos) y se prohibe concurrir a plazas o parques porque “aumenta el riesgo de contagio”.

En Balcarce, ciudad de características similares, el intendente Esteban Reyno (Juntos por el Cambio) enfrenta un panorama complejo: por ahora no tiene ningún caso y de a poco libera las actividades económicas, pero mira de reojo lo que pasa en Mar del Plata, que queda a menos de una hora de viaje. Entre ambas ciudades hay un intenso tránsito de trabajadores, proveedores y vecinos que tratan sus dolencias en clínicas de La Feliz.

“Estamos complicados, como todos, pero no hemos tenido ningun caso y venimos liberando de a poco la actividad económica, sin dejar de hacer controles en los cuatro accesos”, relató Reyno a INFOCIELO. El municipio habilitó algunas actividades deportivas. Se puede hacer ciclismo, en lugares específicos habilitados por la comuna; el trekking, y se contempló además un horario y una modalidad especial para deportistas federados. Para eso se implementó un cronograma diario a partir del número de DNI.

“Si llegamos a tener un caso o un brote, que no logramos identificar, volvemos atrás”, señaló el jefe comunal, electo por Juntos por el Cambio. “Siempre decimos que esto depende de nosotros y del virus”, agregó. Para Reyno, en Balcarce la mayoría de los vecinos acata las normas, pero hay una minoría que lo hace difícil.

En Castelli, más cerca de La Plata (unos 145 kilómetros al sur) también se dan algunos lujos. El Gobierno municipal acaba de habilitar salidas recreativas bajo distintas modalidades: chicos de hasta 6 años por un lado, los de 6 a 12 años en otro horario y los de más edad en otro momento, siempre aocmpañados de sus padres.

También se permiten caminatas y entrenamiento para cooredores y ciclistas, en circuitos y horarios diferentes y manteniendo precauciones estrictas. “Abrimos un poco porque aún no tenemos ningún caso y el comercio debe trabajar como muchos vecinos que ya no aguantan tanto encierro”, explicó el intendente Francisco Echarren desde las redes sociales. El alcalde blanqueó su peor temor: “Tengo miedo que no seamos responsables y nos perjudiquemos, por eso si observamos desbordes o cualquier situacion que ponga en riesgo a Castelli, vamos a retroceder”, advirtió.

El gobernador Axel Kicillof se refirió a la “flexibilización” que se da en el interior, y lanzó una advertencia: “Ha pasado de municipios que pedian autorizacion para medidas de esparcimiento y volvieron atrás”, señaló durante una conferencia de prensa, esta semana.

Ese escenario se dio casi inmediatamente en Baradero, en el norte bonaerense, donde el intendente Esteban Sanzio decidió volver a la “Fase 1” de la cuarentena después de detectar múltiples contagios en pocas horas. Con esto, sólo los comercios esenciales pueden abrir sus puertas. El resto, a sus casas.

“Ya teníamos el 85 % de los negocios abiertos . Habíamos realizado un gran trabajo junto al intendente Esteban Sanzio. No teníamos ningún contagio”, explicó Juan Ramos, secretario de Desarrollo Humano de Baradero, a TN. Es un riesgo que la mayoría de los intendentes están dispuestos a tomar.