Desconfiado de las reales intenciones del Gobierno, la cúpula del radicalismo decidió reforzar en las últimas horas el respaldo político a la gestión de Gerardo Morales , el gobernador de Jujuy jaqueado por el proyecto de intervención al Poder Judicial de su provincia, actualmente bajo tratamiento en el Senado.

"Gerardo cree en la palabra del Presidente, quien le dijo que el pedido no va a avanzar. Pero no sabemos quien maneja el Senado", afirmaron a LA NACION cerca del titular del Comité Nacional, Alfredo Cornejo, quien anoche definió con el ejecutivo partidario convertir el rechazo a la intervención en un "tema central de la agenda del radicalismo en todos los distritos".

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La decisión de convocar para el jueves próximo a una reunión del Comité Federal de la UCR, en Jujuy, va en línea con esa convicción. Estarán allí los presidentes de cada uno de los 24 distritos, los tres gobernadores ( Rodolfo Suárez, de Mendoza, Gustavo Valdés de Corrientes y el propio Morales) más los presidentes de bloques parlamentarios. "El objetivo de la reunión es que le quede claro al Gobierno: en este tema la UCR no va a dejar que avancen un ápice", afirmó a LA NACION el senador José Cano , secretario del Comité Nacional y uno de los opositores al proyecto de intervención, presentado por el peronista jujeño Guillermo Snopek .

El Presidente se despegó hoy del proyecto de intervención , y propuso que sea la Corte Suprema quien se expida en relación con la detención de Milagro Sala , cuya liberación es -según coinciden en el radicalismo- la verdadera razón detrás de la embestida contra la Justicia jujeña, que la condenó a 13 años de prisión efectiva.

"Es un tema que ocurre en otro poder, no es una iniciativa nuestra", dijo el Presidente, en declaraciones radiales y referido a la iniciativa de Snopek. "Se abre un proceso de declaraciones, vamos a ver de qué se trata, y por ahora esperar. Hay situaciones que a uno le preocupan", agregó Fernández, en referencia a la detención de Sala, que durante la campaña a la presidencia consideró "ilegal".

Ayer, la comisión de Asuntos Constitucionales del Senado comenzó el debate y definió continuar con el análisis del proyecto de Snopek el próximo 31 de marzo. "Nos dieron un respiro, pero la cuestión sigue en carpeta", afirmaron desde el comité de la calle Alsina. "La fundamentación del senador Snopek fue paupérrima y es lamentable que con la situación en la que está el país se pierda tiempo en esto. Hay una decisión del Gobierno de ir por la Justicia", agregó el tucumano Cano.

En el radicalismo suman el proyecto de intervención al Poder Judicial de Jujuy a datos inquietantes en las otras provincias gobernadas por el radicalismo. En Mendoza, por caso, el PJ trabó durante semanas el tratamiento del Presupuesto y dejó a la provincia sin posibilidad de refinanciar sus deudas. Y en Corrientes, advierten que la ofensiva kirchnerista "traba" la gestión del gobernador y genera "conflictividad" en las calles, más allá de la reciente revocatoria de la cesión del gobierno de Mauricio Macri al intendente capitalino de 18 hectáreas de la costanera correntina. De todos modos, y más allá del enojo, los mandatarios provinciales confían en continuar con el diálogo con la Casa Rosada. "No nos podemos pelear ni hacer locuras", afirmaron a este diario cerca de uno de los tres mandatarios provinciales.

Morales es, por cierto, uno de quienes diferencia entre Fernández y el kirchnerismo duro, a quien ve detrás del proyecto de Snopek. "Yo creo que el Presidente es un tipo muy sensato, que además lo veo que está metido en semejantes problemas con la deuda y otros temas que tenemos los argentinos, atajando acá, atajando allá, y por abajo el kirchnerismo le mete estos temas que profundizan la grieta", planteó el dirigente radical en declaraciones radiales. Y pidió al cristinismo "que lo deje de joder un poco" con temas como la intervención a la Justicia de su provincia.

La iniciativa de la UCR incluye, en los próximos días, en conseguir el apoyo de colegios de abogados y referentes de la Justicia, para condenar lo que consideran "un intento de avance" sobre la oposición.