Y ante la consulta periodística reconoció: "Si, seguramente se han plegado afiliados al SUTEBA que acompañan nuestra gestión. Nosotros vamos a llevar a cabo reuniones la próxima semana para evaluar los pasos a seguir, seguimos denunciando que no se puede comer en una escuela por $ 6 por día, y el estado de las escuelas es calamitoso. Cerca de 5800 pibes están perdiendo días de clases por estas falencias. Con el frente gremial, vamos a analizar si nos sumamos a los reclamos, por lo pronto el 4 de agosto vamos a adherir a una jornada nacional en reclamo por el impuesto a las ganancias y por el retorno de la universalización de las asignaciones familiares", expresaba la gremialista. 

Es indudable que hay una situación de crisis y tensión en el SUTEBA, a nivel local y provincial. Las últimas elecciones arrojaron resultados muy ajustados, cada vez hay más afiliados a la UDOCBA de Hugo Moyano, y los sectores disidentes a la gestión actual del SUTEBA también aumentan en número y fuerza. 

Por izquierda y por derecha, dentro y fuera, por reclamos y por salario, se vienen tiempos de fuertes fricciones en el sector sindical docente. 

La FEB unilateralmente ya definió un paro el 4 de agosto. 

Todo indica, que con comedores organizados, con escuelas arregladas y con presupuestos ordenados para el 4 de agosto, igual, nada de esto impedirá que ese lunes, los chicos no tengan clases. 

¿Se repetirán los errores generales de principios de año?