De acuerdo a los datos proporcionados por el INV y el análisis del Observatorio Vitivinícola Argentino, este año se destinaron 1.700 millones de kilos de uva para elaborar vinos y mostos en Argentina. Tomando los últimos 21 años, desde 1996 a la fecha, se trata del menor volumen de uva elaborado en todo el período, y por ende los litros de vinos producidos también fueron los más bajos del período.

Con relación a los datos de elaboración, las importaciones de 2016 significan el 0,15% del vino elaborado, es decir que aún con la cosecha más baja obtenida por Mendoza en los últimos años, el vino importado no alcanza al 1% de lo elaborado.

En cuanto a los stocks vínicos, en 2016 la producción fue la más baja en mucho tiempo, haciendoque, para abastecer un mercado, - si bien en 2016 seguramente terminará por debajo de otros años -, hizo falta recurrir a estas existencias, destacándose como dato importante y a tener en cuenta que Argentina no hubiese podido abastecer normalmente sus mercados si hubiese contado solamente con lo elaborado en 2016.

Respecto al año anterior, en 2015 se vendieron, tanto en el mercado interno como en el mercado externo, 1.350 millones de litros de vino y jugo de uva, sin conocer aún los datos finales de ventas de 2016 (ya que los datos están cerrados a octubre) pero suponiendo una caída que ronde el 8%, aproximadamente, las importaciones de vino significarán el 0,14% de lo comercializado 2016 y si consideramos solo el vino, el valor importado será del 0,2%.

La “balanza comercial” del vino argentino también muestra algunos datos contundentes: a octubre de 2016, se exportaron 220 millones de litros de vino por lo que la balanza comercial vitivinícola (exportaciones menos importaciones) es superavitaria en 217 millones de litros de vino.

El análisis específico del comercio con Chile muestra que los vecinos exportaron, acumulado al 23 de diciembre de 2016, 3,3 millones de litros vinos a granel a la Argentina por 1,9 millones de dólares, según datos de ODEPA. A esos datos hay que agregar los 444 mil dólares que Argentina le compró a Chile por 60 mil litros de vinos fraccionados. Mientras que, desde Argentina a Chile, según los datos del Observatorio Vitivinícola Argentino, se vendieron 0,6 millones de litros por un total de 2,9 millones de dólares, a octubre de 2016. Es decir que se refleja un superávit argentino en valor (dólares) y un déficit en volumen (litros).