Urbaser y su apuesta por la innovación como la mayor garantía de economía circular

Urbaser y su apuesta por la innovación como la mayor garantía de economía circular

El Centro de Innovación Alfonso Maíllo (CIAM) de Zaragoza es pionero en Europa y un caso de éxito en España.    

El tejido empresarial español no ha sido tradicionalmente el más innovador de la Unión Europea. Según la Comisión Europea, en julio de 2023, España se situaba en la categoría de países moderadamente innovadores, por debajo de la media europea, y con una tendencia de crecimiento poco esperanzadora.

En todos los países, no obstante, hay empresas avanzadas por encima de la media nacional. Son aquellas conocidas como ‘innovative growers’, aunque también se podrían denominar como agentes del cambio. Son las compañías que, en momentos de crisis, saben anticiparse y reducir el impacto de la incertidumbre en su actividad. Es decir, aquellas que pueden adaptarse al cambio fácilmente y reinventarse sin morir.

Además, las empresas que son agentes del cambio se distinguen por abrir el camino y construir tendencias dentro de sus respectivos sectores. Aragón es testigo de un caso de éxito de este tipo con el Centro de Innovación Alfonso Maíllo (CIAM), una instalación de más de 5.000 metros cuadrados pionera en Europa, a pesar los índices de innovación de España. Este centro, que lleva operativo desde hace casi una década, es el epicentro de proyectos nacionales e internacionales para demostrar la viabilidad económica y tecnológica a escala semiindustrial de las mejores técnicas disponibles para la gestión eficiente de los residuos.

El CIAM es un ejemplo claro de que la innovación en la mayor garantía de economía circular. Se ha convertido en un centro de referencia para la valorización del residuo en un nuevo recurso y para la obtención de materias primas secundarias a partir de residuos plásticos o de biogás a través de residuos orgánicos, entre otros hitos. En el CIAM la circularidad se hace realidad.

Urbaser ha destinado recursos para hacer su actividad más sostenible, sin renunciar por ello a la rentabilidad y a la competitividad. La compañía líder en soluciones medioambientales destina anualmente cerca de diez millones de euros a proyectos de innovación, de entre los cuales el 80% van a parar al desarrollo de proyectos de economía circular. Esta es una máxima que impregna toda la cultura de la empresa, cuyo claim es ‘Making circularity real’ para potenciar el valor de los recursos del planeta.

A pesar de los esfuerzos del sector en general y de Urbaser en particular, por desarrollar soluciones innovadoras de economía circular, España en su conjunto está lejos de alcanzar los objetivos marcados para 2025, entre los cuales destaca reciclar el 55% de los residuos generados. Lo cierto es que no todo depende de las empresas y la colaboración público-privada es indispensable para lograrlo. Por eso, las autoridades también han de redoblar sus esfuerzos por aprobar legislaciones eficientes y coherentes con la realidad.

Una de las más recientes es la Directiva sobre el Derecho a Reparar, en torno a la cual el Consejo y el Parlamento Europeo han alcanzado un acuerdo provisional. El objetivo es incentivar que productores y consumidores prolonguen el ciclo de vida de los productos, priorizando la reparación a la sustitución. También se han dado pasos importantes para poner en el centro de la transición ecológica a los consumidores con otra Directiva que garantizará el acceso del cliente a información importante para su toma de decisión.

Son muchos los ámbitos de la sostenibilidad en los que se están dando pasos de gigante. El escenario ideal es que la innovación empresarial vaya de la mano de una regulación moderna y adaptada a la realidad del sector privado. Fijar estándares excesivamente ambiciosos ha lastrado la ejecución de algunos proyectos empresariales, pero también ha incentivado que las empresas aceleren sus transformaciones.

En plena transformación se encuentra precisamente Urbaser. La compañía ha orientado sus tres líneas de negocio -Servicios Urbanos, Tratamiento y Soluciones Industriales- a la sostenibilidad y la economía circular con el objetivo de conseguir recursos a partir de residuos a través del desarrollo de soluciones circulares de valorización.

La estrategia de economía circular de la compañía cubre múltiples ámbitos. Desde la recuperación de residuos contenidos en materiales hasta el compost o material bioestabilizado que se obtiene de los fangos de gestión de aguas, pasando por el aprovechamiento de residuos biomásicos para soluciones térmicas o la valorización energética de rechazos que, en un 50%, se genera de fuentes de origen renovable.

Gracias a la modernización de sus procesos, a la utilización y generación de energía renovable y a la recuperación de materiales y combustibles, en Urbaser lograron evitar más de 2 millones de toneladas de emisiones de CO2 en 2022. Aplicando las mejores tecnologías disponibles, tanto en inteligencia artificial como en robótica, como demuestra el proyecto con la IA de Recycleye en Algimia (Valencia), logran perfeccionar el equipamiento aplicado a los procesos de clasificación y tratamiento.

Consecuencia de todo esto, el Ministerio de Ciencia e Innovación reconoció a Urbaser con el Premio Nacional de Innovación en la categoría de Gran Empresa Innovadora, confirmando así que apostar por la innovación es la mayor garantía para hacer de la circularidad una realidad.

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