“Muchas gracias Intendente Lunghi por su decisión de dejar sin escenario oficial de competencia al Club Santamarina para sus divisiones menores” disparó Bossio desde su cuenta de Twitter anoticiado de la decisión municipal de no renovarle el contrato para el uso de la cancha de fútbol del predio del Hípico.  El Municipio dispone de los destinos del predio ubicado tras la Ruta 226 donde Santamarina viene desarrollando sus actividades desde hace varios años mientras planifica la construcción de su propio espacio.

“El Club Santamarina aporta mucho al fútbol de Tandil, inclusive, al estadio San Martín, de propiedad municipal. No sólo pagamos un importante canon para el uso del estadio; también mantenemos el campo de juego y hacemos un muy importante aporte para las tribunas. Tal vez debamos reconsiderar algunos compromisos para desarrollar nuestro propio campo de deportes”, añadió el dirigente aurinegro.

“La falta absoluta de políticas deportivas municipales genera estas consecuencias. La discrecionalidad reina. Y no se apuesta a los clubes. ¿Saben cuál es el aporte al Club Santamarina de parte del Municipio? 2300 pesos por mes. Y hace varios meses q no percibimos nada”, dijo en otro mensaje.

El área de Prensa del club emitió un comunicado donde le critica al Intendente confundir el destino del club con la pertenencia partidaria de sus dirigentes.  La foto colocada en el comunicado se remonta al ascenso al Nacional B y la entrega de una camiseta oficial al jefe comunal.  Pero más allá de la foto, el Gobierno no le cede nada a la institución cuyos últimos tres presidentes están vinculados al Peronismo.

“Junto a la Comisión Directiva del club y autoridades de la Liga Tandilense de Fútbol evaluaremos este escenario y definiremos qué hacer. Lo último que digo es que hace cuatro años soy presidente del Club Santamarina y el secretario de Deportes municipal no me cito nunca”, concluyó Bossio antes de pedir “madurez democrática” por parte del lunghismo.