En el Portal de la Memoria, situado en la intersección de Hipólito Yrigoyen y San Martín, se evocará a los miles y miles de civiles perseguidos y desaparecidos durante la cruenta dictadura militar que rigió los destinos del país entre 1976 y 1983.

El Portal de la Memoria es un sitio emblemático de los salteños debido a que en ese lugar se recuerda a las 11 víctimas de la Masacre de Palomitas, registrada el 6 de julio de 1976. Fue el caso más sangriento de la política de terrorismo de Estado aplicada en la década del 70 y parte del 80 en Salta. El juicio de lesa humanidad permitió la condena a prisión perpetua de los coroneles retirados Carlos Alberto Mulhall, Miguel Raúl Gentil y Hugo César Espeche (Palomitas I), luego fueron condenados a prisión perpetua el represor y máximo responsable militar de la provincia, Luciano Benjamín Menéndez; y el ex jefe de la policía de Salta, Joaquín Guil y a 20 años de prisión el ex oficial subinspector de la Policía Federal, Juan Carlos Alzugaray (Palomitas II); mientras se lleva adelante el proceso judicial contra el ex juez federal Ricardo Lona -a cargo de este funcionario estaban los 11 detenidos y masacrados en Palomitas- así como de tres ex miembros del Servicio Penitenciario Provincial, Napoleón Soberón, Nicolás Oliva y Eduardo Carrizo y el militar Joaquín Cornejo Alemán (Palomitas III).

El acto es organizado conjuntamente por el gobierno de la Nación, el gobierno provincial y la Municipalidad, con el aporte de la Asociación Lucrecia Barquet, Encuentro Memoria Verdad y Justicia, el Archivo Provincial de la Memoria, la agrupación H.I.J.O.S., el movimiento Unidos y Organizados y MegaCausa. En tanto, adhieren a la conmemoración, el gremio de ADIUNSa, el Movimiento Obrero, Campesino, Estudiantil y Popular (MOCEP), la Comisión de ex presos políticos y la Agrupación Oscar Smith, del Sindicato Luz y Fuerza- LyF- seccional Salta.

Un día como hoy pero de 1976, se produjo el golpe de Estado que depuso al gobierno constitucional de María Estela Martínez de Perón, dando inicio a la dictadura cívico-militar más sangrienta de la historia argentina. Entre los hechos oscuros de la dictadura denominada Proceso de Reorganización Nacional, sobresalen la persecución política, la muerte y desaparición de miles de militantes políticos y civiles. Cabe destacar que durante la gestión del presidente Néstor Kirchner, se impulsó desde el Poder Ejecutivo Nacional que la fecha se convirtiera en un día no laborable, inamovible.