En una Mendoza donde los anuncios de inversión no abundan en lo que va del 2010, lo de Rayén Curá es noticia. La principal proveedora de envases de vidrio de la industria vitivinícola confirmó un proyecto de U$S 60 millones que iniciará en los próximos meses para incorporar un tercer horno a su planta actual, con el objetivo de elevar un 60% su producción en los próximos dos años.

Fundada en 1947, Rayén Curá fue adquirida en 1998 por el Grupo francés Saint-Gobain (SG), que hoy lidera el mercado mundial para vinos y licores con más de 60 plantas industriales en el mundo. Por su magnitud, la decisión tomada por SG significa la mitad de todas las inversiones realizadas en los últimos doce años en la provincia por este grupo en 12 años.

Aquí en Mendoza, su producción está totalmente destinada a una industria vitivinícola que, con las exportaciones a granel paralizadas, apuesta fuerte al vino fraccionado como su punta de lanza.

"Veníamos estudiándola desde hace más de dos años. Creemos en el mercado vitivinícola y en un crecimiento que se ha mantenido en el 6% anual y a cuya demanda estamos respondiendo bien. Pero prevemos que para 2012 hay que estar preparados para un ritmo de de crecimiento del 9%, además de la exigencia de más y mejor tecnología", señaló al respecto Walter Formica, director general de Saint Gobain-Rayén Curá.

Hoy, la planta emplea a 360 trabajadores y cuenta con dos hornos que en conjunto sostienen una producción anual de 400 millones de envases por año. Una vez concluida la obra (empezaría a ejecutarse no antes de los próximos 6 meses, una vez terminado el proyecto de ingeniería) el objetivo es elevar el nivel a 640 millones de unidades anuales.

Según precisó el directivo, el proyecto comprende una nueva planta industrial anexa a la actual, que incluye obra civil (galpón), el horno junto a líneas de fabricación, equipos de control de calidad y paletizado de las botellas.

"Se trata de un horno eficiente en cuanto a consumo energético, acorde a que Rayén Curá está entre las 100 empresas más comprometidas con el medio ambiente a nivel mundial", añadió Formica.

Para la firma, la inversión es el nuevo hito. El anterior había sido diez años atrás, cuando se puso en marcha el segundo horno de la planta, como parte de un presupuesto de U$S 50 millones.

Energía, la clave

"Si bien en 2009 no tuvimos mayores inconvenientes, la realidad del 2012 dirá si podemos ponerla a plena capacidad desde un principio", se sinceró Formica.

Es que ninguna industria puede dejar de lado la preocupación sobre la forma de asegurarse el suministro energético en virtud de lo que ha sido el cuello de botella en las épocas de mayor demanda durante los últimos años.

Por eso, la conducción de Rayén Curá se anticipó y desde hace tiempo mantiene gestiones con el Gobierno mendocino y la Nación a fin de lograr las garantías necesarias de abastecimiento. "Estamos trabajando en eso", coincidieron ejecutivos y funcionarios al respecto.

Por lo pronto, desde la cartera de Producción destacaron que es "uno de los proyectos más importantes que le presentamos a la ministra de Industria, Débora Giorgi".

Para el subsecretario de Promoción Económica, Javier Espina, "sin duda, una inversión está atada a la provisión de energía; por eso esperamos que todas las obras en materia de gas para 2010 se den según lo anunciado y estamos haciendo todo lo posible. Abril será un mes clave".