La protesta de la policía por los salarios se trasladó a Entre Ríos

La protesta de la policía por los salarios se trasladó a Entre Ríos
Hubo concentraciones en los accesos a las ciudades de Concordia y de Gualeguaychú, pero no llegaron a cortar la ruta para evitar sanciones; el Gobierno siguió de cerca el tema, viajó Berni y envió gendarmes
Policías entrerrianos protestaron ayer en Concordia y en Gualeguaychú por la falta de respuesta a su pedido de aumento salarial, y expresaron su malestar por la decisión del gobierno provincial de no reconocer el acuerdo que firmó el gobernador Sergio Urribarri el 5 de diciembre, mediante el cual se comprometía a llevar el sueldo mínimo a 8434 pesos.

En el acceso a las ciudades entrerrianas se concentraron un centenar de personas. En Concordia estuvieron sobre la ruta 4 y, en Gualeguaychú, en el Acceso Sur. Aunque habían anunciado que cortarían el tránsito por la denominada ruta del Mercosur, los policías autoconvocados optaron por manifestarse a la vera de la cinta asfáltica y así evitar sanciones disciplinarias.

"Vemos con mucha preocupación que el gobierno provincial nos ha cerrado las puertas y no quiere atender nuestra situación. Por eso vamos a hacernos sentir con mayor fuerza: vamos a ir a la casa del gobernador y los funcionarios a manifestarnos", dijo Leandro Coutinho, vocero de la protesta, ante una consulta de LA NACION.

Si bien no tiene fecha de realización la nueva protesta, los policías autoconvocados dijeron que no descartan trasladar la concentración a la capital provincial, y más precisamente frente a la vivienda particular de Urribarri.

Coutinho recordó que Urribarri había firmado un acuerdo "que ahora se niega a cumplir". "No hay ánimo en los gobernantes de aceptar la situación de los policías. Estamos pidiendo diálogo, pero la Casa de Gobierno se ha cerrado. No nos llaman, no nos atienden y los únicos que se acercaron a la concentración son un chofer del gobernador y el jefe de la custodia, pero sólo para ver; parece una burla", se enojó el vocero de la protesta.

El Ministerio de Justicia de la Nación confirmó ayer en su página web que Urribarri había pedido refuerzo de agentes de Gendarmería, y que desde la Nación se habían enviado. Sin embargo, desde el gobierno entrerriano no se hizo ningún tipo de alusión a la protesta en Concordia.

En momentos en que se desarrollaba la protesta, el secretario de Seguridad, Sergio Berni, se encontraba en suelo entrerriano, según informó un cable de la agencia DyN, que también dio cuenta de la llegada de 400 gendarmes a territorio entrerriano. El funcionario mantuvo una reunión en el aeropuerto de Gualeguaychú con autoridades de la Prefectura Naval y de la Gendarmería, en momentos en que había sendas manifestaciones, de policías y de productores rurales (ver aparte).

Los policías desistieron de cortar la ruta por el asesoramiento de sus representantes legales. El abogado Cesar Bonato fue elegido como mediador ante el gobierno, pero hasta el momento no ha habido contacto con las autoridades provinciales.

"Es necesario que el gobernador evite un problema que se va agravar, y lo puede hacer anunciado un aumento salarial a la policía. El reclamo es justo y la situación social es grave", definió el mediador judicial, ante una consulta de este diario.

Bonato aseguró que la decisión de cortar la vital ruta 14 estaba tomada la semana pasada, pero que para evitar consecuencias laborales se decidió no interrumpir el tránsito ese día ni tampoco ayer.

"He disuadido a los policías de que no corten la ruta porque le imputarían un delito. La manifestación ha sido pacífica, pero los estados de ánimo están muy agitados, y el gobernador, si no resuelve ya el problema, debe al menos abrir la Casa de Gobierno para dialogar".

El malestar de los policías se debe a que el gobierno provincial se rehúsa a aceptar el compromiso que el propio Urribarri firmó con los policías autoacuartelados, por el cual el gobierno aceptaba llevar el sueldo mínimo a 8434 pesos de bolsillo e iniciar un acuerdo paritario en febrero.

Además se comprometió a "no iniciar actuaciones administrativas que deriven en sanciones contra ningún agente policial que haya intervenido en las manifestaciones de protesta", según dice el acta que también llevó la firma del obispo de Concordia, Luis Collazuol.

Sin embargo, las autoridades gubernamentales sostuvieron luego que Urribarri firmó bajo extorsión. Eso generó una controversia del gobierno con el Obispado de Concordia y el Centro Comercial de esa ciudad, que emitió un comunicado conjunto mediante el cual aseguraron que "no es cierto que el acta que el gobernador Sergio Urribarri firmó con los policías en protesta se haya realizado bajo presión".

La protesta de ayer ocurrió un día después de que en Córdoba se produjera una situación similar, que obligó al Gobierno a enviar 1000 gendarmes para reforzar la seguridad..

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