Luego de la tormenta de viento y granizo que azotó a la Capital, en el asentamiento del Pirayuí, las familias se encuentran abocadas a reconstruir los ranchos. El caso de los hermanos Blanco es un emblema de la ocupación y da cuentas del problema que significa en la actualidad acceder a una vivienda social, si se es joven y no se cuenta con un trabajo estable.

Son Johana y Daniel Blanco de 16 y 17 años respectivamente, que desde el inicio de la ocupación se encuentran apostados en la zona. Mientras arreglaban los daños ocasionados por la tormenta contaron a época como llevan la supervivencia a casi tres meses de la toma.

Ella vive en una casilla alzada con maderas, su beba de seis meses y marido, quien al momento de la entrevista se encontraba trabajando en la labor que ejerce como ayudante de panadería. Su tez fresca hablaba de una asimilación casi liviana de las pésimas condiciones en las que habita desde una mirada ajena a la propia.Su juventud, sea el secreto de tanta osadía. “Cuando fue la tormenta estábamos acá y por suerte nada nos pasó; pusimos esta lona para que no le cayeran piedras a la gorda”, dijo

La niña Nahiara, lucía tranquila y rozagante, aunque con uno de sus ojos de párpados caídos. Contó Johana, que se debe a una especie de infección, tras estar expuesta a la humedad y el frío. Si bien ya está recibiendo tratamiento, debe ser sometida a nuevos estudios. “Tiene todas las vacunas y la estamos llevando al médico, pero el mes pasado estuvo con una neumonía por el frío”, detalló.Ayer a la mañana se encontró con Daniel, uno de sus tres hermanos, que están la zona en casillas de madera. Ya cuentan con tv, heladera y cocina; ahora procuran el agua. Ellos dejaron la secundaria y se dedican a la vida de adultos que conforman una familia. Sin embargo, las condiciones para su presente y futuro son preocupantes. Sin estudios y trabajo estable, a mediano, podrían ser excluidos del sistema.

Forman parte de los 1.500 censados por la Justicia, en virtud del conflicto por la usurpación de 43 hectáreas de las cuales 32 son demandadas por Privados. Si bien el Juzgado en lo Civil y Comercial Nº 8 ordenó la “inmediata asistencia” por parte de Provincia y Comuna, aún no se hizo efectiva.