“En aquella precariedad de Tucumán un grupo de hombres se reunieron para tomar una decisión, una descripción perfecta de la situación de época, perfecta. Y pensé mientras hablaba monseñor Martínez que todos tomamos decisiones todos los días, quién va a ser nuestra pareja, qué vamos a plantar en la chacra, la vida es una secuencia de decisiones. Pero cuando uno va ascendiendo en cierta escala de responsabilidad política, gremial, eclesiástica, lo que fuere, esas decisiones impactan no sobre uno, sobre la familia de uno sino sobre el resto, sobre la gente, sobre ustedes”, expresó el mandatario en su discurso, luego de haber participado del Tedeum en la Catedral de Posadas.

“Y ahí es cuando uno tiene que tener la cabeza fría y volver un poco la vista atrás de vez en cuando, cada año un acto como éste, es un ritual y es una forma de saber de dónde venimos para tener dimensión de lo que se hizo, sino parece todo muy fácil, hay asfalto, hay luz eléctrica tarde o temprano el que no la tiene la va a tener. Estamos en el camino del progreso, un paso adelante un paso atrás, pero siempre yendo hacia el camino correcto”, añadió.

El acto arrancó con el izamiento del pabellón nacional en la plaza central 9 de Julio, frente a la Casa de Gobierno. El gobernador estuvo acompañado por el vicegobernador, Oscar Herrera Ahuad, el intendente local, Joaquín Losada, el gobernador de Itapúa, Paraguay, Luis Gneiting, el intendente de Encarnación, Luis Yd y representantes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad.

Luego la comitiva se trasladó a la Catedral donde se se llevó adelante el tradicional Tedeum, ofrecido por el Obispo de Posadas, Juan Rubén Martínez.

“Si hoy tenemos Patria, si hoy tenemos una Latinoamérica libre es porque él se fue a Tucumán y hubo gente que en Tucumán tomó, como decíamos señor una decisión que impactó sobre el resto”, señalaba Passalacqua al referirse al General San Martín.

“Honor y gloria a ellos y a tantos personajes que hoy nos permiten disfrutar de ser dueños, y escúchenme bien, dueños de nuestros propios destinos. Si nos equivocamos es falencia nuestra y me hago cargo de mis errores grandes o pequeños, pero somos libres de decidir. Nadie manda, ni mandará nunca jamás sobre el destino de la Patria Argentina”, cerró con un fuerte “¡Viva la Patria!”.

Ante miles ciudadanos posadeños y vecinos de la ciudad de Encarnación, sobre la calle Bolívar, se realizó el típico desfile cívico-militar con participación de escuelas y fuerzas de seguridad.