El 7 de noviembre será el día de largada del nuevo Control Simplificado Migratorio, el sistema con el que la Coordinación Binacional Argentino Chilena quiere dar más agilidad al cruce internacional por el paso internacional Cristo Redentor.

Ese día, y por espacio de una semana, hasta el viernes 11, se hará la marcha blanca, es decir el sistema estará a prueba. En ese período se buscará verificar si la unificación de los sistemas informáticos funciona en forma correcta.

Los gobiernos de ambos países trabajan en la unificación de los sistemas informáticos aduaneros desde febrero pasado con la idea de que los viajeros se ahorren un paso en el trámite para cruzar de un país al otro.

Hasta ahora para viajar hacia Chile cada persona tiene que cumplir cuatro pasos en la zona de frontera.

Primero hay que pasar Migraciones de Argentina, luego entregar documentación en la Policía de Investigaciones de Chile (PDI); después pasar por la cabina de la Aduana argentino chilena y por último atravesar el control del Servicio Agrícola Ganadero (SAG).

A partir del 7 de noviembre se eliminará el primer paso y el viajero directamente entregará la documentación en la PDI chilena porque se trabajará con el sistema informático integrado. De ahí pasará por Aduana y luego por el control del SAG.

A la vuelta, también habrá un paso menos, en lugar de pasar primero por la PDI chilena directamente pasará a la ventanilla que corresponde a la Aduana.

Esto permitirá reducir los tiempos de espera; porque si bien son pocos minutos por persona, en la sumatoria general se verá la diferencia, aseguran todas las autoridades involucradas en estas modificaciones a la hora de agilizar los trámites.

Es importante destacar, remarcan los funcionarios, que no hay ningún cambio en los papeles que se presentan habitualmente. El viajero no verá ningún cambio en los formularios y requisitos que se solicitan actualmente.

"Ha costado mucho llevar adelante esta integración, se han realizado muchas pruebas; es un gran avance porque esto ha implicado el intercambio de información entre los dos países, por lo que valoramos mucho el espíritu colaborativo que han mostrado las autoridades y técnicos de los dos países para lograr este objetivo", remarcó el director de Migraciones en Mendoza, Alejandro Diumenjo.

Este sistema se ha probado primero en el paso de Santa Cruz, que es mucho menos transitado que Cristo Redentor. Allí fue necesario hacer varios ajustes hasta lograr que los sistemas informáticos funcionaran, explicó Diumenjo.

Está previsto que luego de la implementación en este cruce fronterizo, se implementará en el paso norteño de Jama.

El objetivo es que todos los pasos fronterizos que unen ambos territorios cuenten con este sistema informático con el objetivo de acelerar el tránsito entre los dos países.

Meta a cumplir

Quieren que el sistema esté totalmente aceitado a partir del 1 de diciembre, fecha en la que la coordinación habilita Playa Siberia, en el sector chileno, con la totalidad de las cabinas disponibles durante todo el verano.

La habilitación de todos los puestos permitirá agilizar al máximo el tránsito por el corredor internacional. La apertura de las cabinas exteriores coincide con la época de verano porque durante el invierno las inclemencias climáticas no permiten mantenerlas abiertas. En esta oportunidad se abrirán inclusive un poco antes que otros años a pedido de las autoridades argentinas, previendo que el tránsito será muy intenso considerando todo lo que se ha incrementado la circulación en el corredor internacional por el fenómeno de los viajes de compras.

El anuncio se hizo a principios de 2016 durante un acto en el que participaron las autoridades de los dos países.

Precisamente el 18 de febrero pasado los ministros de Relaciones Exteriores de Argentina y Chile, Susana Malcorra y Heraldo Muñoz; los del Interior, Rogelio Frigerio y Jorge Burgos, y los embajadores José Octavio Bordón y José Antonio Viera Gallo firmaron un acuerdo para agilizar los trámites en el sistema Cristo Redentor y evitar así las demoras.

El plan no prevé cambios respecto del control de vehículos y de los que realizan los sistemas fitosanitarios de ambos países, es decir el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) chileno y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), de Argentina.

Aunque se estima que la Aduana argentina también trabaja en un sistema para mejorar los controles y agilizarlos al máximo posible.