El cura villero elogió la figura del flamante Papa Francisco y destacó “el apoyo que hace a la Iglesia más pobre”. “La gente puede estar tranquila”, aseguró. En exclusiva, el religioso contó sobre su trabajo en San Martín y la charla que mantuvo con el intendente Gabriel Katopodis.
Antes de que llegue a San Martín, ¿Bergoglio colaboró para que usted se traslade de Barracas a Santiago del Estero?
Exacto. El traslado lo decidí yo porque me parecía oportuno dejar libre el lugar para que puedan seguir trabajando bien los sacerdotes que estaban conmigo, además de descomprimir un poco la situación. Me pareció bueno pensar en los demás más que en uno mismo. Él aceptó esta idea, después de un tiempo, de alejarme. Estuve dos años afuera, pero siempre en conextión y compartiendo con él la experiencia en Santiago.
¿Cree que Bergoglio puede marcar una bisagra en la situación de la Iglesia?
Lo más importante es el apoyo que él hace a la Iglesia más pobre. En Buenos Aires él optó por los sectores de mayor pobreza, como es la villa. Con eso marcó el estilo que quiere. Yo supongo que va a llevar esa línea y, así, la gente puede estar tranquila.
¿Por qué fue electo él en este momento?
Se dice que en la elección anterior él salió segundo y en eso los cardenales han trabajado con mucha seriedad. Le habrán visto condiciones en su momento para guiar a la Iglesia. Creo que es un voto coherente
¿Cómo está su trabajo hoy en San Martín?
Recién empezamos. La verdad que me da gusto trabajar con otros sacerdotes y laicos, a los que estoy conociendo. Es la primera vez que un cura diocesano vive en las villas y para la gente es una novedad. Este año será de conocimiento e inicio de pequeñas acciones. Con la gente iremos viendo las posibilidades de trabajo más organizado.
En La Cárcova ha habido tiroteos y situaciones bastante pesadas. Imagino que usted estará trabajando sobre esas situaciones…
Eso es muy común en los barrios de Capital y a mí no me llama la atención. Al contrario, he escuchado más en las villas de Buenos Aires que en estos días en La Cárcova. Sí veo que hay un afán de progreso. Veo el asfalto y cómo están trabajando mucho grupos, organizaciones sociales y ministerios. Esperemos que todo esto lleve a que, entre todos, podamos darle una vida más digna y un camino para que los chicos y los jóvenes puedan realizarse en la vida.
¿Ya se le acercó alguna autoridad del municipio para conversar sobre su labor?
Cuando di la primera misa estaba en un banco una persona joven. Se me acercó y me dijo que era el intendente. Me pareció una persona muy abierta y lo tenía de vista ya que ha ayudado mucho en las villas de Buenos Aires también. Me invitó a tomar mate a la Municipalidad para contarle lo que hemos hecho y las actividades previstas como cura de las villas de la zona. Nunca me había pasado que las autoridades estén así con tanta apertura.
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