El oficialismo del PJ pampeano amplía su base de representación a partir de sumar a los desencantados con los viejos liderazgos de Rubén Marín y Carlos Verna.

En las últimas horas quedó "casi cerrado" el acuerdo con el principal referente de Identidad Peronista, Jorge Lezcano. El exdiputado provincial podría integrar las listas legislativas provinciales o ser precandidato en Santa Rosa. De todos modos advirtió: "en la política, la desconfianza es el elemento fundamental cuando estamos en un proceso de negociaciones".

Mientras se define si el gobernador Oscar Mario Jorge será postulante a la Intendencia para asegurar la victoria de Compromiso Peronista en la capital provincial, también avanzan las conversaciones con el tiernismo: la diputada Sandra Fonseca podría encontrar un lugar en las nóminas electorales, además de ubicar al piquense José Edreira como precanidato a intendente.

Lezcano dijo públicamente que “el acuerdo es más que una candidatura mía; no es un acuerdo personal sino de Identidad Peronista. Es un acuerdo amplio, provincial. Incluye al menos dos candidatos a diputados, concejalías en varios pueblos y las precandidaturas a intendente en Santa Isabel y Miguel Cané”, confirmó.

Consultado sobre si hay un acercamiento concreto, respondió: "Sí, de hecho desde el año pasado cuando se decidieron las autoridades partidarias. Compromiso es el que nos contiene. Si tenemos que llegar a un acuerdo para que las expectativas de los compañeros tengan una respuesta. El acuerdo tiene que ser amplio, tenemos que formar parte de un acuerdo electoral y un futuro gobierno".

Lezcano señaló que él tiene "inserción" en la ciudad. "Tenemos una base territorial, empezaremos por las intendencias. Si Jorge quiere ser intendente, no hay problema. Pero el acuerdo debe ser provincial, debe contenernos", explicó en Radio Kermés. Y advirtió que el acuerdo "no va a pasar por una persona y un cargo".

Hizo referencia a la última interna en la que participó, contra Luis Larrañaga, por la Intendencia en 2011: "Nunca pude decir que nos robaron las elecciones porque tendría que tener pruebas, pero hay cosas que son evidentes aunque no haya constancia administrativa o jurídica", recordó.

Aclaró que le gustaría ser intendente, pero que la política no es necesariamente cumplir con un deseo personal: "lo que tenemos es un proyecto político", dijo. Cuestionó a la gestión de Larrañaga y lamentó la situación de Santa Rosa. "No importa ahora quién es el culpable, pero sí cómo está Santa Rosa: hay que disponer de los mejores hombres para recuperar los servicios públicos que colapsaron".

Respecto de las disidencias con la Plural y Convergencia, señaló: "Hay muchas diferencias, marcadas y relevantes para de futuro. Nosotros estamos perteneciendo a un proyecto de país, uno no puede alinearse. La Pampa, con lo que falte -porque somos críticos- estuvo alineada y queremos seguir. Es una razón fundamental... Es para mirar también con atención el apoyo público de Scioli a Marín. Bruna tuvo un acierto en plantear que busca una nueva cultura política... tenemos muchas coincidencias, queremos practicar la política con un diálogo permanente, priorizar el interés de los trabajadores".

-¿Cómo juega en ese escenario el hecho de que el tiernismo también quede alineado en ese sector?

-Primero tenemos un proceso electoral y después un proceso gubernativo. Tenemos que ver quién va a ser el gobernador y quiénes lo acompañamos. Si voy a lo particular, digo que al tiernismo hay que tenerle respeto, ha tenido 4 diputados, tiene inserción en Santa Rosa, tiene a Sandra Fonseca como cara visible y es una trabajadora que no se puede desmerecer. Tuve diferencias con Juan Carlos Tierno y sus metodologías, pero no es para personalizar. Sumarnos a un proceso que tiene ganas de generar procesos posteriores... no habría problemas, evidentemente.