El nuevo plan educativo fija metas que no se cumplieron

El nuevo plan educativo fija metas que no se cumplieron
Por Pablo Sigal

Muchos de los anuncios que hizo anteayer el Gobierno sobre educación son medidas que ya están contempladas en leyes vigentes. Por ejemplo, la obligatoriedad de los trece años y la doble jornada.

El Gran Rex suele ser escenario para ficciones cantadas o habladas, no para anuncios políticos. Pero el martes fue una de las excepciones. En ese contexto, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el ministro Alberto Sileoni presentaron el “Plan Nacional de Educación Obligatoria y Formación Docente” 2012-2016, que define cuáles son los objetivos a cumplir en el quinquenio. Sin embargo, varios de esos objetivos ya deberían haberse cumplido, a partir de 2006 en algunos casos, y de 2010 en otros. Si esta vez se cumple con las promesas, según los plazos estipulados los resultados podrían verse hasta diez años más tarde de lo que las leyes vigentes señalaban.

Durante la presidencia de Néstor Kirchner se votaron dos leyes fundamentales para la educación argentina: la Ley Nacional de Educación y la Ley de Financiamiento Educativo. La primera rige desde 2006 y fija la educación obligatoria en 13 años: desde sala de 5 hasta el final del secundario. Además, obliga al Estado a garantizar la oferta para la sala de 4 años, aunque este nivel por ley no es obligatorio.

Sin embargo, Sileoni anunció el martes último que recién desde 2014 se dará cobertura a 25.000 chicos de 5 años aún no escolarizados. Y, por otro lado, se construirán 3.000 aulas para darles la posibilidad a 120.000 chicos de 4 años de que se incorporen al sistema. “Ya llegamos al 70% de escolarización en el nivel inicial y queremos que al 2016 todos los chicos en ese nivel estén en la escuela”, dijo Sileoni, mientras con su anuncio reconocía tácitamente el incumplimiento.

Por otro lado, el nuevo plan prevé duplicar para 2016 la cantidad de escuelas de doble jornada o jornada extendida, de 2.400 a 4.800. Pero la Ley de Financiamiento Educativo establecía que para 2010 el 30% de las escuelas debían ofrecer esta posibilidad a los alumnos. Y sólo se llegó al 6%. Ahora, ni con la nueva promesa se llegaría a la cobertura de lo que exige originalmente la ley. Otro de los objetivos de esa norma que sí se cumplió (e incluso se superó la meta) fue lograr que el presupuesto en educación alcanzara el 6,47% del PBI.

Otra aspiración expuesta el martes sobre el escenario del Gran Rex fue lograr que en todo el país se cumplan los 190 días de clase, aunque esto en realidad se trató de un relanzamiento de la misma meta que el Consejo Federal de Educación había aprobado a fines de 2011 y que el año pasado lograron cumplir sólo cinco provincias. La resolución 165/11 del Consejo había establecido que a partir del ciclo lectivo del año pasado las jurisdicciones confeccionarían “los calendarios escolares con el objetivo de cumplir los 190 días de clases. Pero siete provincias ni siquiera llegaron a los 180 días, aunque Sileoni dijo el martes sobre este último objetivo: “Lo logramos”.

Cuando los discursos terminaron, en el Gran Rex repleto se escuchó un aplauso cerrado, digno de sus mejores noches de gala.

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